5 increíbles oradores en público y lo que puedes aprender de ellos

El orador con talento natural es un mito. Si tiemblas de nerviosismo ante la idea de subirte al escenario o te sudan las palmas de las manos solo de pensar en hacer una presentación en una reunión de trabajo, ¡felicidades! Eres humano. Es más que normal preocuparse por tu actuación cuando todos los ojos están puestos en ti. Sin embargo, cuando los grandes oradores nos asombran, es fácil que nos invada la idea de que algunas personas simplemente han nacido con ese don. Al igual que nosotros nacimos con nuestro don de la ropa personalizada

Sin embargo, todos los grandes oradores que parecen tan relajados durante su presentación y que se sienten cómodos frente a una gran audiencia tienen una cosa en común: han trabajado muy duro y han desarrollado su don. Así que presta atención: hablar en público y cautivar a una audiencia son habilidades que puedes aprender, practicar y perfeccionar.

La importancia de la oratoria

Unas grandes habilidades para hablar en público te permitirán unir a la gente, provocar cambios y alcanzar tus objetivos, tanto en los negocios como en tu vida. He aquí por qué un discurso impresionante es tan importante:

Aventaja a la competencia con la confianza en ti mismo: puede que estés nervioso, pero también lo está todo el mundo. Presentarse es la mitad del logro, ¡y también lo es hablar! Si consigues hacerlo, ya vas por delante, y aumentarás tu confianza en ti mismo cuanto más lo hagas.
Siéntete más cómodo: cuando la gente se reúne, habla. Para muchos, esto es incómodo porque no saben qué decir. A medida que tus habilidades para hablar en público aumenten, también lo hará tu nivel de comodidad en compañía de los demás.
Consigue tus objetivos: hacer una venta, conseguir un aumento de sueldo o clavar una entrevista de trabajo puede depender en gran medida de tu capacidad para presentarte a ti mismo y a tus ideas a través del discurso.
Transmite tu mensaje con claridad: Cuando perfeccione sus habilidades en el camino para convertirse en un orador inspirador, tendrá que averiguar claramente lo que quiere decir. Un gran orador es como un guía que establece un hilo conductor y lleva a la audiencia a un descubrimiento.
Consigue apoyo: hacer un discurso en público puede atraer a personas afines que están dispuestas a dar su apoyo, pero que quizá no te hubieran buscado por su cuenta.

Grandes oradores en público

¡Aprende de los mejores! Ahora que conoces los beneficios de las habilidades de hablar en público y que esos grandes oradores han adquirido sus habilidades a través de la dedicación y el trabajo duro, estás listo para aprender algunos trucos de ellos. Estos oradores ejemplares en público pueden darte notas:

Steve Jobs

Adivina qué: Steve Jobs, aclamado como uno de los narradores corporativos más notables de la historia, no empezó como el bendito orador que crees conocer. Su primera entrevista en televisión, en 1978, lo muestra nervioso y aterrorizado. Incluso más tarde, cuando ya era conocido por su personalidad tranquila y serena ante grandes audiencias, se le podían escapar sus estruendosas rabietas cuando las cosas no salían según lo previsto. La sencilla verdad que hay detrás de la oratoria aparentemente sin esfuerzo de Jobs es el ensayo y la repetición. Su presentación del iPhone en 2007 está considerada como una de las mejores presentaciones empresariales de la historia. Steve Jobs contó una historia que simplificaba un concepto, vendía el beneficio e inspiraba a la audiencia – todas las lecciones que todavía puedes aprender de él para mejorar tu oratoria.

Martin Luther King

Tengo un sueño de Martin Luther King Jr. es ampliamente considerado como el mejor discurso del siglo XX. Fue un punto álgido para el movimiento de los derechos civiles y contribuyó a que King ganara el Premio Nobel de la Paz en 1964. Estas son algunas de las cualidades de Martin Luther King que vale la pena emular: hablaba con una confianza inquebrantable y con una voz que, mediante la cadencia y el ritmo, añadía pasión a su discurso. Construía la intensidad a través del ritmo y la repetición, pero no temía saltarse el guión cuando veía la oportunidad de conectar plenamente con la gente.

Taylor Swift

A sus 25 años, Taylor Swift no es la mujer mejor pagada del mundo de la música por pura casualidad o accidente. Ha demostrado ser muy astuta a la hora de perfeccionar su propia marca utilizando las redes sociales y, sí, hablando en público. Cuando has conseguido decenas de marcas de tus propias frases (como «This sick beat»), lo estás haciendo bien. Parte del éxito de Taylor Swift es su enfoque en sus clientes, es decir, sus fans. La gente conecta con ella porque puede identificarse con su ligereza y entusiasmo. Por encima de todo, Taylor Swift no se toma demasiado en serio a sí misma y siempre se mantiene comprometida con sus fans, reconociéndoles y dándoles las gracias, un gesto honesto que a menudo se pasa por alto en los negocios.

Robin Williams

Robin Williams era divertido de una manera única que simplemente no se puede imitar, pero todavía se puede aprender de él una habilidad de comunicación fundamental: la espontaneidad. Estaba presente en el momento y aceptaba todo lo que se le presentaba, haciendo que funcionara para él. No hace falta que intentes ser más listo que él, sino que te entrenes para agudizar tu mente y añadir expresión física a tus palabras utilizando tu cuerpo y el atrezzo. Siempre es posible añadir humor en el momento a un discurso preparado y seguir manteniéndose en el camino e inspirar al público al mismo tiempo, como ejemplifica el discurso de aceptación de los Premios Acadamy de 1998 de Robin Williams. Durante cualquier discurso, lo inesperado puede ocurrir y ocurrirá. En lugar de intentar estar preparado para todo (pista: es inútil), aprovecha lo espontáneo.

Mohammed Qahtani

Es cierto que es probable que no hayas oído su nombre antes, pero Mohammed Qahtani ganó el título de Campeón Mundial de Oratoria de Toastmasters International 2015. Su discurso «El poder de las palabras» se impuso a otros nueve finalistas y demostró literalmente cómo un gran orador público tiene el control de su audiencia para cambiar sus mentes y alterar sus creencias. Primero consigue que los presentes estén de acuerdo con su defensa de la industria tabacalera, y luego se da la vuelta y revela que todos los datos y cifras que acaba de utilizar eran pura invención.

Cómo puedes convertirte en un orador impresionante

Estudia tu tema

Cuanto mejor conozcas el tema del que vas a hablar más seguro estarás y menos probable será que pierdas el sitio o tropieces en mitad del discurso. Si es posible, siempre debes elegir un tema que te guste o que te interese mucho. Investiga el tema y asegúrate de que entiendes las partes con las que no estás demasiado familiarizado. Demostrar un amplio conocimiento de tu tema te dará confianza y autoridad cuando hables.

Razón

Una vez que tengas tu tema, conoce por qué vas a dar el discurso. Das un discurso para inspirar, entretener, persuadir o provocar. Ten claro el propósito de tu discurso incluso antes de empezar a escribirlo. Si no tienes un motivo claro para dar tu discurso, entonces tu audiencia no tiene una razón clara para escuchar.

Practica. Practica. Practica.

Ahora que has descubierto el tema de tu discurso, lo mejor que puedes hacer es practicar. Practica frente al espejo, en la ducha o donde te sientas cómodo hablando en voz alta. Practica siempre tu discurso delante de amigos y familiares para ver sus reacciones y recibir comentarios. Esto te ayudará a hacer correcciones, a ver con qué partes de tu discurso no te sientes del todo cómodo, y además te estás familiarizando con tu discurso.

Practica todo lo que tengas que practicar, ¡pero no memorices! Puede que tengas el discurso perfecto en casa, pero te garantizo que una vez que te pongas delante de tu público olvidarás partes de tu discurso. Conoce el flujo de tu discurso y hacia dónde se dirige para que, cuando olvides algunas palabras, puedas cubrirlas rápidamente.

Da la bienvenida

Comienza tu discurso con una cálida bienvenida. Esto puede venir en forma de una broma rápida o una historia con la que se puedan relacionar. No sólo te ayudará a calmar un poco los nervios, sino que también captarás la atención del público.

Conoce a tu público

Conocer a tu público antes de escribir el discurso te ayudará a hablar con sus emociones y dirigirte a ellos adecuadamente. Así podrás hablarles directamente de sus intereses, objetivos o necesidades.

Antes de que comience el evento, puedes intentar mezclarte con el público para sentirte un poco más a gusto una vez que tengas que dar el discurso. Si está nervioso durante el discurso, encontrar una sonrisa agradable y cálida de un miembro del público que le resulte familiar puede suponer realmente una gran diferencia.

Dé un paso más allá de simplemente conocer a su público e implique a la audiencia. Haga preguntas que los miembros del público puedan levantarse y responder. Obtener una respuesta del público puede ayudar a centrar una charla.

Utiliza imágenes

Para mantener la atención de la audiencia, intenta utilizar palabras más fuertes en comparación con las anodinas habituales para crear una imagen en la mente de la gente. Por supuesto, tiene que estar centrada en tu tema central, pero las imágenes pueden ser un concepto muy poderoso a la hora de dar discursos.

Bonus: Utiliza frases célebres. Otra forma de cautivar la atención de tu audiencia es utilizar frases célebres de autores conocidos que la gente pueda recordar.

Visualízate dando un discurso épico

Para realmente poder dar ese discurso épico, es más que escribirlo. Tienes que visualizarte dando el discurso de tus sueños. Esto es beneficioso para aumentar la confianza y puede ser útil para practicar y reforzar tu discurso. Si te ves a ti mismo dando una charla increíble, entonces tu público la vivirá.

Finaliza con fuerza

Todo gran discurso tiene un final fuerte. Termina con una línea que la gente recuerde y que contenga un mensaje que quieras que recuerden. Aparte de la línea de apertura, ésta es la más importante. Utilízala bien.

Palabras finales

No importa si todavía estás verde cuando se trata de dar discursos o si ya eres un orador experimentado, Toastmasters International ofrece útiles consejos rápidos y fáciles para aumentar tu confianza y mejorar tus habilidades. Sobre todo, cree siempre en ti mismo y tu público también lo hará

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