Banksy: Biografía, obras y exposiciones
Banksy es el seudónimo del pintor de grafitis más destacado del Street Art contemporáneo. Aunque no hay datos biográficos concretos, se cree que nació en las afueras de Bristol en 1974 y que posteriormente se trasladó a la ciudad donde pasó su adolescencia. Un estudio reciente de la Universidad Queen Mary de Londres identificó al artista como Robin Gunningham y confirmó que creció en Bristol. Según el ilustrador y diseñador gráfico Tristan Manco, uno de los más fervientes investigadores del arte urbano, el controvertido Banksy fue aprendiz de carnicero antes de dedicarse al grafiti durante el «boom del aerosol» de los 80. En los 90, fue miembro de la banda de Bristol DryBreadZ, también conocida como DBZ, momento en el que su fama comenzó a extenderse como un reguero de pólvora, principalmente debido a su guerra de sobrepintadas con el mejor grafitero del momento, King Robbo.
Banksy es el seudónimo del pintor de graffiti más destacado del Street Art contemporáneo. Aunque no hay datos biográficos concretos, se cree que nació en las afueras de Bristol en 1974 y que posteriormente se trasladó a la ciudad, donde pasó su adolescencia. Un reciente estudio de la Universidad Queen Mary de Londres identificó al artista como Robin Gunningham y confirmó que se crió en Bristol.
Según el ilustrador y diseñador gráfico Tristan Manco, uno de los más fervientes investigadores del arte urbano, el controvertido Banksy fue aprendiz de carnicero antes de dedicarse al grafiti durante el «boom del aerosol» de los 80. En los 90, formó parte de la banda DryBreadZ de Bristol, también conocida como DBZ, momento en el que su fama comenzó a extenderse como un reguero de pólvora, principalmente por su guerra de sobrepintadas con el mejor grafitero de la época, King Robbo, cuya obra a lo largo de Regent’s Canal en Camden Banksy se tomó la libertad de «renovar» repetidamente hasta que, al enterarse del estado de coma del difunto Robbo, puso fin a su disputa y rindió a su rival una serie de sentidos homenajes.
Robbo inc, disponible en streetartlondon.co.uk
El 12 de julio de 2008, el Mail on Sunday anunció que había descubierto su verdadera identidad, revelando su nombre como Robin Gunningham, que el verdadero Sr. Gunningham siempre ha negado cuando se le ha preguntado. Según otras fuentes, su verdadero nombre podría ser Robert Banks o Robin Banks, aunque este último parece ser un juego de palabras con la expresión «robar bancos».
Sea cual sea el caso, el misterio sigue rodeándole. Según Will Simpson, secretario del club de fútbol Bristol Easton Cowboys and Cowgirls, el artista les acompañó en una gira por México en 2001 en la que jugó partidos contra los Combatientes de la Libertad Zapatista. Existen fotografías de él pintando un mural en honor a su causa, con su rostro pixelado bien oculto bajo un pañuelo y sin ninguna otra pista discernible de su identidad. Esas fotos se publicaron en el libro «Freedom Through Football: The Story Of The Easton Cowboys & Cowgirls’.
Banksy pintando un mural en México, disponible en www.12ozprophet.com
En su libro ‘Wall And Street’, Banksy recuerda sus inicios como artista callejero rociando la pintura directamente sobre la pared. Sin embargo, esta técnica requería tiempo, lo que suponía un riesgo, ya que el grafiti no era ni arte ni legal en aquella época. Por ello, empezó a cortar a mano y a utilizar plantillas de cartón y carpray para acelerar el proceso, lo que tenía la ventaja añadida de que sus murales parecían mucho más «logrados».
El término «Street Art» engloba todas las formas de expresión artística cuyo escenario es exterior, urbano y, aparentemente, ilegal. En sus inicios, estas pinturas o textos dejados en paredes, edificios y vagones de tren recibieron el nombre de grafitis. Sus orígenes se remontan a los guetos afroamericanos y latinos del Nueva York de los años 60 como reacción a las condiciones y la opresión en que vivían. Los primeros grafiteros compartían gustos culturales en cuanto a música, baile y moda, y fue aquí donde nació el hip-hop. Más tarde, se empezaron a utilizar más técnicas artísticas, como el estarcido, el cartel pegado con trigo, las plantillas, las instalaciones, la escultura y el arte de las pegatinas.
Los mensajes implícitos en ellos eran invariablemente críticos desde el punto de vista político o social, como lo son los de Banksy: «Un muro es un arma muy grande. Es una de las cosas más desagradables con las que puedes golpear a alguien»
Pocas imágenes ilustran mejor esta idea que su mural «Maid In London», en el que una sirvienta uniformada barre la basura detrás de una pared, como si dijera: lo que no queremos ver, lo ocultamos.
Maid in London, disponible en academics.skidmore.edu
Banksy comenzó pintando ratas por todas las calles de Bristol que le sirvieron como instrumento de ridiculización contra «El Sistema». Influido por, entre otros, el grupo punk Crass y el movimiento Ad Jammers que se centraba en deformar y transformar las imágenes publicitarias y, por tanto, su mensaje, la obra de Banksy siempre ha buscado una crítica social o moral, en forma de ironía o sátira, en forma de escritura, estarcido o grafiti.
Pero si alguien fue alguna vez la inspiración o influencia de Banksy, ese fue Blek le Rat, un prolífico grafitero parisino de principios de los 80. De él copió la técnica del stencil y el aerosol como medio para expresar sus críticas y quejas: «Cada vez que creo que he pintado algo vagamente original, descubro que Blek ya lo hizo, mejor, 20 años antes.»
Si el grafiti cambiase algo – Sería ilegal, disponible en noticias.fitzrovia.org.uk
Después de aquellos primeros grafitis de ratas tomando fotos de transeúntes o escuchando música, vinieron más trabajos que seguían criticando las hipocresías sociales, sólo que ahora también aparecían en buzones, portales y desagües. Su «Desnudo» de 1988 aún puede verse en la fachada de la clínica Park Street y no es el único: toda una serie de creaciones decoraron primero Bristol y luego Londres, siendo ejemplos conocidos los dos policías besándose, la MonaLisa con rifle bazuka o los nativos huyendo perseguidos por un carrito de supermercado.
Mona Lisa With Bazooka Rocket, disponible en nohaycomolodeuno.blogspot.com.es
Para entonces, ya colaboraba con un agente, Steve Lazarides, un antiguo fotógrafo que había documentado las primeras incursiones adolescentes de Banksy en el arte del grafiti y con el que compartía la gestión de su página web en la que ambos añadían fotografías de todas y cada una de las nuevas creaciones y gracias a la cual aún queda constancia de las que luego han sido borradas, demolidas o pintadas. Lazarides confiesa haber ayudado a organizar las infames maniobras que consistían en infiltrarse en los museos más famosos del mundo y desvelar el arte de Banksy de forma clandestina, como ocurrió en el Museo de Historia Natural de Londres con una rata disecada clavada dentro de un marco. Y eso no fue todo. En el Museo Británico, por ejemplo, consiguieron colgar un aparente cuadro de paisaje que, al examinarlo más de cerca, revelaba una escena de caza con un carrito de supermercado. En el MOMA de Nueva York se expuso, sin saberlo, su retrato de una dama vestida de época con una máscara de gas. «El arte no será ni belleza ni novedad. Será efectivo y será perturbador», según el artista.
Su obra alcanzó otro nivel tras ser instalada subrepticiamente y vista en cuatro museos neoyorquinos (el Metropolitan, Brooklyn, Historia Natural y Arte Moderno) y también cuando su arte callejero empezó a verse por todo el mundo en otras grandes ciudades como Melbourne y París. En el año 2000, decidió organizar una exposición individual y lo hizo en el Severnshed, un restaurante flotante, distinguiéndose así de todos los demás artistas callejeros. Luego, en 2003, llegó otra exposición, esta vez en Londres, mientras que más tarde, en 2005 y 2007, dos de las creaciones más importantes y llamativas de su carrera ~ los murales de Gaza y Cisjordania.
Banksy, disponible en prospectornow.com
Banksy, que lo consideraba «la mayor prisión al aire libre del mundo», cubrió el ‘Muro de la Vergüenza’ en Cisjordania con pinturas al fresco que expresaban su oposición. Cuadros de niñas agarrando globos en un intento de escapar, atisbos de cielo azul y paisajes idílicos vistos a través de agujeros y grietas son un grito de atención contra su construcción y existencia. La repercusión fue tal que, aún hoy, existe un recorrido turístico alternativo para visitarlos.
Chica y soldado por Banksy, disponible en http://www.stencilrevolution.com/
A estas alturas, las obras de Banksy se podían encontrar en todo el mundo, desde Los Ángeles hasta Barcelona. Entre ellas, imitaciones del «David» de Miguel Ángel con un chaleco antibalas y los «Girasoles» de Van Gogh, completamente marchitos. En 2006 pintó un niño negro demacrado y desnutrido con esa corona asociada a una cadena de comida rápida muy conocida.
Una muestra de éxito que destaca es su ‘Banksy Versus Bristol Museum’ en 2009 que supuso el cierre del edificio al público durante tres días mientras se hacían los preparativos secretos a gran escala. La ironía de que todo esto fuera financiado por quienes le habían censurado anteriormente no pasó desapercibida para Banksy, que comentó: «Esta es la primera exposición que hago en el mundo»: «Esta es la primera exposición que he realizado en la que el dinero de los donantes se ha utilizado para mostrar mi obra en lugar de borrarla».
Disponible en www.plataformadeartecontemporaneo.com
Uno de los principales huesos de la discordia entre sus seguidores y detractores es el precio desorbitado que se paga por algunas de sus obras. Para un artista tan antisistema y tan crítico con el capitalismo, a algunos les parece bastante irónico que sus obras sean de las más caras del mercado. Por ello, algunos artistas callejeros le acusan de haberse «vendido» a los poderes fácticos. Banksy, que una vez dijo que «el éxito comercial es un desastre para los grafiteros», vio cómo su conjunto de retratos de Kate Moss al estilo de «Marilyn Monroe» de Warhol se vendía por 80.000 dólares en Sothesby’s en 2006. Y de nuevo en abril de 2007, su «Space Girl & Bird» (pintura en spray sobre acero) se vendió por medio millón de dólares. Unos meses después, Bonham’s vendió diez de sus obras por un total de medio millón de libras esterlinas (700.000 euros). Y las pujas no muestran signos de detenerse ahí. Sin embargo, en 2013, Banksy decidió abrir un puesto ambulante cerca de Central Park en el que vendía lienzos originales y firmados por 60 dólares cada uno. Curiosamente, solo se compraron ocho.
Kate Moss, disponible en www.banksy-prints.com
Durante su gira por Nueva York ese mismo año, Banksy llevó a cabo una exposición ilegal llamada «Better Out Than In» (Mejor fuera que dentro) mediante la cual creó una obra de arte diferente cada día en algún lugar de las calles de la ciudad. Lo tuiteó: «¡Estoy deseando ensuciarme las manos esta noche!». Y ciertamente lo hizo, utilizando grafitis, esculturas e incluso vídeos para transmitir su característico humor sarcástico.
Nunca lejos de la polémica, son muchos los que han denostado su trabajo: algunos lo califican de vandalismo; otros de pura hipocresía por criticar el capitalismo mientras trabajan para grandes empresas como Puma y MTV. Para otros, tomemos por ejemplo a Gareth Williams, responsable de Arte Urbano de Bonham’s en Londres: «Lo más increíble del fenómeno Banksy no es su ascenso meteórico, ni los altos precios que pagan los coleccionistas, sino el hecho de que el propio establishment al que satiriza le ha recibido con los brazos abiertos.»
Rata fotógrafa,disponible en www.whatsonyourwall.com
Y así hasta la polémica que rodea a su documental de 2010 titulado «Exit Through The Gift Shop». Muchos esperaban que se revelara todo sobre su misterioso artista, pero esperar fue lo máximo que consiguieron. El documental fue nominado a un Oscar, así como a un Independent Spirit Award y a un BAFTA, y obtuvo excelentes críticas en los periódicos Los Angeles Times y Chicago Sun Times, por nombrar sólo dos. En él, Banksy nos presenta a Thierry Guetta, un francés que vive en Los Ángeles y cuya única obsesión es filmar al artista en vídeo. Ambos se conocen y Banksy decide dirigir la cámara en su lugar hacia Guetta, convenciéndole de que se infiltre en el mundo del Arte Urbano con el alias de Mr. Brainwash y convirtiéndole en una celebridad por derecho propio.
Clips de «Exit Through The Gift Shop» (Thierry, Banksy: ¿Puede el marketing crear un artista?)
Y aquí es donde se desató la polémica. Lo que dice el documental sobre el señor Brainwash es realidad o ficción? ¿Es un actor o es real? Para muchos, no era más que un elaborado montaje de Banksy para mostrar en qué se ha convertido el arte callejero, es decir, un producto de consumo más, una oportunidad de inversión aprovechada por las clases altas y Thierry Guetta o Mr. Brainwash no era otra cosa que el alter-ego del propio Banksy. Y para engrosar aún más la trama, el artista Ron English confirmó que Thierry Guetta era totalmente real y que el propio Banksy había explicado en una conversación sus motivos para hacer la película ~ para ridiculizar a Guetta por su egoísmo al negarse a compartir cientos de horas de filmación del artista en acción.
Chica con un piercing en el tímpano encontrada en Banksy.co.uk
En octubre de 2014, Banksy creó un nuevo ‘retrato’ en forma de grafiti de «Chica con un tímpano perforado», una parodia de la «Chica con un pendiente de perla» de Vermeer en la que cambió la joya por una alarma de seguridad en la pared frontal de un estudio de grabación en Hanover Place, Bristol. La obra tuvo mucha repercusión en los medios de comunicación, sobre todo porque se hizo en la ciudad natal del artista y poco después empezaron a circular los rumores de su supuesta detención. Sin embargo, 24 horas después, la obra fue arruinada con pintura negra en un claro acto de vandalismo y antagonismo hacia su autor. Y no fue ésta la primera, ni la última, ni la única vez que la obra de Banksy sufrió daños: su «Art Buff» en Kent, por ejemplo, fue vandalizado con un burdo pene. Sin embargo, debido a la notoriedad que ha alcanzado en los últimos años, algunas de sus obras de arte públicas están ahora protegidas tras láminas de plexiglás transparente, lo que permite protegerlas o restaurarlas con mayor facilidad.
Uno de los murales de Banksy antes de ser cortado en 3 piezas y trasladado a una exposición. Encontrado en banksy.co.uk
Una de las más recientes exposiciones sobre el artista, montada por The Sincura Group bajo el título «The Stealing Banksy», tuvo lugar en Londres en 2014, exponiendo 7 obras de arte callejero que luego iban a ser subastadas. No es la primera vez que Banksy rechaza a gritos todo el proyecto, a pesar de que los organizadores le aseguraron el consentimiento de los propietarios del edificio. Se le cita calificando de «simplemente repugnante que cualquiera pueda quitar el arte de las paredes sin permiso»
Dismalandia de Banksy. Publicado en Flickr por Peter Gasston
En agosto de 2015, Banksy inauguró la instalación temporal de estilo parque temático «Dismaland» en colaboración con otros 58 artistas. Cuando esta cerró sus puertas, el equipo de construcción trasladó lo que había desmontado a un campo de refugiados en Calais y construyó varias viviendas y un parque de atracciones para familias de refugiados. Tras la reciente y forzada evacuación del campamento, la web oficial de Dismaland (http://www.dismaland.co.uk/) dice simplemente: «Dismaland Calais ha cerrado».
Son Of A Syrian Immigrant. Found at Banksy.co.uk
Ese diciembre, una nueva pintura de Banksy titulada «El hijo de un inmigrante sirio» apareció en una pared del campamento, con la imagen del fallecido multimillonario fundador de Apple, Steve Jobs, con una bolsa de pertenencias colgada al hombro. Es un claro ataque a las condiciones que soportan los inmigrantes sirios en el infame campamento de la «Jungla» en el puerto francés.
Encontrado en banksy.co.uk
Sus críticas a la situación continuaron en enero de este año cuando apareció su primera obra de arte interactiva. En una tabla de madera colocada frente a la Embajada de Francia en Knightsbridge, pintó a Cosette, la niña del póster de «Los Miserables», con una bandera francesa rasgada detrás de ella, lágrimas rodando por sus mejillas y un bote de gas lacrimógeno ondulante debajo. Un código QR escaneable en la parte inferior de la imagen enlaza con un vídeo de Youtube que muestra a la policía disparando gases lacrimógenos durante una redada en el campamento de Calais, el 5 de enero de 2016. Las fotos de la imagen se hicieron virales y, 42 horas después, unos ladrones intentaron robarla, por lo que la policía metropolitana se vio obligada a intervenir y salvaguardarla.
En febrero, la parte del muro en cuestión fue cubierta por completo por Cheval Property Management Limited, propietaria del terreno en el que se encuentra el edificio. Sin embargo, confirmaron que se trataba de una medida temporal hasta que se «decidan los planes futuros para la obra».
Del 13 de enero al 29 de febrero de 2016, las obras de Banksy se expusieron por primera vez en Estambul en la muestra «El arte de Banksy» con el patrocinio del Ministerio de Cultura turco. La exposición, que coincidió con la inauguración de la galería Global Karaköy, llevó casi un año a un grupo de 80 expertos que se encargaron de rastrear, requisar y catalogar los últimos 15 años de trabajo del artista. «Banksy ha realizado una enorme cantidad de obras, la mayoría de las cuales nunca han sido vistas por mucha gente. Yo he conseguido hacerme con ella gracias a coleccionistas que han hecho un esfuerzo enorme por revelar las piezas y su paradero», ha dicho Steve Lazarides, comisario de la exposición, que también ha confirmado que es la más extensa jamás realizada sobre la obra del escurridizo Banksy.
Los visitantes de la exposición pudieron disfrutar de ella de forma singular, ya que incluía réplicas detalladas tanto de las calles de Londres como del taller de Banksy, lo que les permitió acceder más de cerca y experimentar de forma más vívida el contexto de creación de los grafitis y la energía poética, crítica y humorística de este misterioso y muy comentado artista.
El artista en su estudio
Sin importar lo que pueda o no ocurrir a su alrededor, es innegable que Banksy es el artista más cotizado, controvertido y admirado en su campo. No necesita publicidad, ni busca la aprobación porque sus creaciones hablan por sí mismas y provocan la reflexión de quienes las ven. Demasiados cuadros suyos han desaparecido, como, por ejemplo, casi todos los que tienen que ver con los Juegos Olímpicos de Londres de 2012. La gente ha intentado desbaratar su obra, destruyéndola y dañándola o robándola para venderla a precios exorbitantes. Muchos otros, sin embargo, encuentran su obra y sus palabras inspiradoras, aspiran a seguir sus pasos e imitar su inconfundible estilo.
Banksy vs Bristol Museum