Colocación de cámaras en el hogar

Las siguientes son sólo sugerencias que pueden no aplicarse a todas las instalaciones. Antes de comenzar la instalación, camine por las áreas donde planea ubicar las cámaras. Si es posible, párese en la ubicación de cada cámara. Preste atención a lo que ve, ¿puede ver todo lo que quiere en ese lugar? Lo que usted vea, lo verá la cámara. Si la respuesta es negativa, o si hay un punto ciego evidente, busque una mejor ubicación para la cámara.

Las cámaras de interior pueden instalarse prácticamente en cualquier lugar. El montaje en la pared o en el techo está bien. Normalmente, las cámaras se instalan en una esquina de la habitación frente al punto de entrada. Esto suele proporcionar la mejor cobertura y requiere que cualquier persona que quiera manipular la cámara sea grabada antes de que tenga acceso a ella. La mejor altura para una cámara suele ser de unos 3 metros o más. Esto es lo suficientemente alto como para evitar que la gente acceda a la cámara a menos que tengan una escalera. También hay que tener en cuenta que, si se orienta la cámara hacia una ventana o puerta exterior, la visión puede ser algo limitada durante los días soleados. Todas las cámaras están equipadas con un iris automático, y funcionan muy bien. Pero siguen teniendo sus límites y tendrán que ajustarse al nivel de luz interior o al nivel de luz exterior. Sea cual sea el que se ajuste, el otro será menos óptimo.

Nota: Menos de la mitad de los sistemas residenciales tienen cámaras interiores. Hay varias razones que todos podemos adivinar, pero colocar adecuadamente las cámaras en el exterior, en el perímetro, puede ser igual de eficaz sin renunciar a la privacidad.

Las cámaras de exterior siguen las pautas básicas de las cámaras de interior. Aunque están diseñadas para resistir a los elementos y pueden funcionar en condiciones extremas, sigue siendo conveniente protegerlas si es posible, durarán más. Si tiene que elegir entre montar la cámara directamente en el tejado para que reciba todo el peso del sol, la lluvia y el viento o en el lateral de un edificio donde esté algo protegida… elija el lateral del edificio.

¡No pida a una cámara que haga el trabajo de dos!
El error más común que cometen los clientes al ubicar las cámaras es intentar que una cámara haga el trabajo de dos. Todos queremos sacar el máximo provecho de cada cámara, pero si te pasas con la cobertura, puedes estar tirando tu dinero. Todos hemos visto un vídeo en el que se comete algún delito, pero debido a la falta de detalles que ofrece el vídeo, no se puede identificar a la persona. La lección aprendida es: «Sea conservador con la cobertura que espera que proporcione cada cámara». Como regla general, no se debe esperar que cada cámara vea más de 30-40 pies horizontalmente a la distancia de visualización preferida.

Las cámaras situadas en las esquinas de la casa con vigilancia de trampa son comunes y eficaces. La vigilancia con trampa es la forma más rentable de vigilancia en interiores. Las cámaras se colocan estratégicamente para que una persona no pueda moverse de una zona de la casa a otra sin ser vista y grabada. Este diseño reduce el número de cámaras necesarias para proteger eficazmente el interior de una casa, manteniendo la privacidad de los dormitorios y los baños.