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Fenómeno de Raynaud: Manejo y tratamiento

¿Cómo se trata el fenómeno de Raynaud?

Los objetivos del tratamiento son reducir la gravedad de los ataques y prevenir el daño y la pérdida de tejido en los dedos de las manos y los pies. Los médicos pueden recetar medicamentos a algunos pacientes, normalmente a los que padecen el fenómeno de Raynaud secundario; sin embargo, lo más frecuente es que los médicos prescriban tratamientos no farmacológicos.

Varios tratamientos no farmacológicos, descritos a continuación, pueden ayudar a disminuir la gravedad de un ataque de Raynaud, así como a promover el bienestar general.

  • Sea proactivo durante un ataque: Un ataque de Raynaud no debe ser ignorado. Si se toman las medidas adecuadas, se puede disminuir la duración y la gravedad del ataque. La primera y más importante acción es calentarse las manos y los pies. Si hace frío, hay que entrar en casa. Pasar agua caliente por los dedos de las manos y los pies o sumergirlos en un recipiente con agua caliente también ayuda. Aprender técnicas de relajación, así como tomarse tiempo para relajarse, ayudará aún más a acabar con un ataque.
  • Manténgase caliente: No sólo es importante mantener las manos y los pies calientes, sino que también es útil evitar el enfriamiento de cualquier otra parte del cuerpo. Cuando haga frío, preste especial atención a su forma de vestir. Se recomienda llevar varias capas de ropa suelta, calcetines, gorros y guantes o manoplas. Los sombreros son especialmente importantes porque una gran parte del calor corporal se pierde a través del cuero cabelludo.
    • Mantenga los pies y las manos secos y calientes. Los calentadores químicos, como las pequeñas bolsas térmicas que pueden colocarse en los bolsillos, las manoplas, las botas o los zapatos, pueden proporcionar una protección adicional durante largos periodos al aire libre. Otras sugerencias son:
      • Evite tocar metales fríos
      • Evite meter las manos en agua fría o sostener bebidas heladas
      • Evite las habitaciones con aire acondicionado o las secciones de alimentos congelados de las tiendas de comestibles en la medida de lo posible
    • Practique un buen cuidado de la piel: Evite la sequedad o el agrietamiento de la piel aplicando una cantidad abundante de crema hidratante o crema de manos, especialmente después de lavarse las manos.
    • Deje de fumar: La nicotina hace que la temperatura de la piel baje, lo que puede provocar un ataque.
    • Aprenda a controlar el estrés: Dado que el estrés puede desencadenar un ataque, especialmente en el caso de las personas que padecen el fenómeno de Raynaud primario, aprender a reconocer y evitar las situaciones estresantes puede ayudar a controlar el número de ataques. Muchas personas han descubierto que los ejercicios de relajación o el entrenamiento de biorretroalimentación pueden ayudar a disminuir el número y la gravedad de los ataques.
    • Ejercicio: Muchos médicos animan a los pacientes que padecen el fenómeno de Raynaud a hacer ejercicio con regularidad. La mayoría de las personas encuentran que el ejercicio promueve un bienestar general, aumenta el nivel de energía, ayuda a controlar el peso y promueve un sueño reparador. Los pacientes con el fenómeno de Raynaud secundario deben hablar con un médico antes de hacer ejercicio al aire libre cuando hace frío. Hable siempre con su médico antes de iniciar un programa de ejercicios.
    • Vaya al médico: Debe consultar a su médico si está preocupado o asustado por los ataques o si tiene preguntas sobre cómo cuidarse. Acuda siempre al médico si los ataques se producen sólo en un lado del cuerpo (una mano o un pie) y en cualquier momento en que un ataque provoque llagas o úlceras en los dedos de las manos o de los pies.
    • Medicamentos: Las personas con el fenómeno de Raynaud secundario tienen más probabilidades de ser tratadas con medicamentos que las que padecen la forma primaria. Muchos profesionales de la salud creen que los fármacos más eficaces y seguros son los bloqueadores de los canales de calcio, que relajan los músculos lisos y dilatan los pequeños vasos sanguíneos. Estos fármacos disminuyen la frecuencia y la gravedad de los ataques en aproximadamente dos tercios de los pacientes que padecen el fenómeno de Raynaud primario o secundario. Estos fármacos también pueden ayudar a curar las úlceras cutáneas de los dedos de las manos o de los pies.
    • Otros medicamentos que han ayudado a los pacientes con Raynaud son los alfabloqueantes, que contrarrestan la norepinefrina, una hormona que contrae los vasos sanguíneos, y los vasodilatadores (fármacos que relajan los vasos sanguíneos), como la pasta de nitroglicerina, que se aplica en los dedos, para ayudar a curar las úlceras cutáneas.

      Es importante señalar que el tratamiento con medicamentos no siempre tiene éxito. A menudo, los pacientes con la forma secundaria de Raynaud no responden tan bien al tratamiento como los que tienen la forma primaria del trastorno. Los pacientes pueden descubrir que un fármaco funciona mejor que otro y algunas personas pueden experimentar efectos secundarios que requieran la suspensión de la medicación. Para otras personas, un fármaco puede perder eficacia con el tiempo.

      Independientemente de la medicación que utilice un paciente, es importante que programe citas de seguimiento con su médico para poder controlar los efectos de los medicamentos.

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