Las diez mejores cosas que hacer en Capri
1) Una excursión en barco alrededor de la isla
Descubra Capri desde el mar, y luego recuéstese en un bote de remos de madera para entrar en la mágica Gruta Azul.
Las excursiones en barco parten del puerto de Capri, Marina Grande, y continúan pasando por el Salto de Tiberio a lo largo de la costa sur de la isla hasta las famosas formaciones rocosas de los Faraglioni, rodean Punta Carena con su pintoresco faro y hacen una parada frente a la Gruta Azul.
Aquí, los que deseen visitar la gruta pueden subir a bordo de pequeñas embarcaciones de remo de madera, las únicas capaces de caber dentro de la cueva marina.
¡Puedes optar por unirte a una excursión organizada en grupo, o alquilar un barco con patrón sólo para ti!
Recorrido por la isla
2) Un cóctel en la Piazzetta
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- Da Antonio
- Maliblu
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Todo aquel que visite la isla debe hacer una parada en la famosa plaza principal, conocida como la Piazzetta, y pasar unos minutos en una de las mesas de los cafés al aire libre para darse el gusto de observar a la gente.
Si quiere codearse con los visitantes VIP, el mejor momento del día es entre las 7 y las 9 de la tarde, cuando la mayor parte de los visitantes del día se han ido y los actores y celebridades famosos llegan a la isla desde sus yates para disfrutar de una noche en Capri. Que, por supuesto, comienza con un cóctel en la Piazzetta.
¿Cuánto cuesta un espresso en la Piazzetta?
Si se pide en una mesa al aire libre, un espresso cuesta unos 4 euros. Los cócteles cuestan unos 10 euros. Los precios en los cafés de la plaza son más o menos los mismos.
La Piazzetta de Capri
3) Subida al Monte Solaro con el telesilla
Desde la Piazza Vittoria en Anacapri, puedes subir en el telesilla hasta la cima del Monte Solaro, donde podrás contemplar las vistas desde la cima, hacer fotos y parar a tomar algo en la cafetería «La Canzone del Cielo».
Vuelve a bajar por la ladera de la montaña, siguiendo las indicaciones hacia la ermita de Cetrella, una pequeña capilla encaramada en la ladera de la montaña que en su día fue un refugio para ermitaños. Si la iglesia está abierta, eche un vistazo al interior; los guardianes estarán encantados de mostrarle las preciosas terrazas sobre el mar.
Monte Solaro
4) Un paseo hasta Tragara (y más allá)
Desde la Piazzetta, baje hacia el Hotel Quisisana, asegurándose de mirar los escaparates de las boutiques de lujo que hay por el camino. Una vez que gire la esquina, se encontrará en la luminosa y silenciosa Via Tragara.
Esta calle bordea los jardines de las villas y hoteles más hermosos de Capri, con el mar brillando más allá del dulce jazmín y las coloridas buganvillas, y termina en un mirador con vistas a las formaciones rocosas de los Faraglioni.
Desde aquí, puedes optar por continuar tu paseo hacia Pizzolungo
5) Un trago en el faro
¿Dónde puedes ver la puesta de sol más espectacular de la isla de Capri? Definitivamente, desde el faro de Punta Carena, el único punto de la isla en el que puedes ver cómo el sol se hunde en el Mediterráneo.
Intenta llegar al faro por la tarde, darte un chapuzón en el mar, tomar el sol un rato y luego tomar un cóctel mientras ves la puesta de sol.
Hay dos cafés de playa donde puedes pedir una bebida:
6) Una cena romántica
La mejor manera de terminar tu día en la isla de Capri es con una cena romántica con vistas o una cena tradicional con especialidades de la isla.
Si es su primera vez en Capri, no olvide probar los platos tradicionales locales ravioli capresi, rellenos de queso caciotta y mejorana, y la torta caprese, elaborada con chocolate y almendras.
Aquí tienes algunas sugerencias sobre dónde ir a cenar en Capri.
7) Una noche en la taverna
«¿Qué hacemos esta noche?». Esta es la pregunta habitual que se plantea durante la hora del cóctel en la Piazzetta, mientras todo el mundo sigue sentado alrededor de las mesas al aire libre bebiendo lo último del día antes de que caiga la noche… un lánguido ritual vespertino que obliga a los visitantes de la isla a ralentizar su ritmo para que coincida con el ritmo pausado de Capri. Después de uno o dos cócteles, la multitud se desplaza poco a poco hacia la cena. Sólo alrededor de la medianoche comienzan a llenarse los locales nocturnos de la isla… entre estos puntos calientes locales de Capri se encuentran las llamadas «taverne», entre las que se encuentra Anema e Core, con bandas en directo que dirigen a la multitud en canciones y bailes al ritmo de la tarantela o de los clásicos napolitanos.
Cómo vestirse para salir por la noche en Capri
Capri es una isla informal, y los visitantes pueden vestir como quieran. En algunos de los restaurantes más formales (los que se encuentran, por ejemplo, en hoteles de lujo), los hombres deben llevar pantalones largos. Se aconseja a las mujeres que dejen los tacones en casa, ya que las empinadas calles de Capri son difíciles de recorrer con tacones. Es mucho mejor seguir los pasos de Brigitte Bardot y Jackie Kennedy, que hicieron famosas las «sandalias de Capri» planas.
8) Un día de playa
¿Qué hay mejor que relajarse en una tumbona, bebida en mano, y contemplar las aguas cristalinas del Mediterráneo? Las playas de Capri son escasas y pequeñas, talladas en la costa rocosa por el viento y el agua y carentes de arena. Los establecimientos de la playa, sin embargo, son como salones de mar, con excelentes restaurantes de marisco y pescado donde relajarse durante todo el día.
Playas y establecimientos de playa en Capri
9) Un paseo por el centro de Anacapri
Este pueblo situado en el punto más alto de la isla es mucho más tranquilo y apacible que el bullicio del centro de la ciudad de Capri. Es un placer pasear por las callejuelas flanqueadas por talleres artesanales, las diminutas plazas con sus bancos de mayólica y los callejones entre casas con tejados tradicionales en forma de barril.
El centro histórico de Anacapri
10) Contemplar la Esfinge de Villa San Michele
El médico y escritor sueco Axel Munthe construyó su villa en el punto más pintoresco de toda la isla, y soñaba con colocar una estatua de una esfinge frente a la amplia vista del mar. Buscó su estatua soñada durante sus largos viajes por Europa, y finalmente encontró la perfecta. Todavía vigila los sueños de los visitantes de la villa y de la isla de Capri.
Villa San Michele