Los peligros de la mezcla de benzodiacepinas y opiáceos

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Los profesionales médicos llevan mucho tiempo advirtiendo al público sobre los peligros del policonsumo. Mucha gente es consciente de los peligros de mezclar drogas como las benzos y el alcohol, pero hay una tendencia creciente de personas que se dedican al policonsumo de drogas como Xanax o Valium con Oxicodona u otros opioides. Tanto las benzodiacepinas como los opioides son depresores del sistema nervioso central con un alto potencial de abuso. Aunque ambas drogas pueden ser peligrosas y adictivas cuando se consumen por separado, mezclarlas es especialmente arriesgado.

Benzodiacepinas

Opioides

Efectos en el organismo

Si bien ambas sustancias tienen fines terapéuticos cuando se toman según lo prescrito, un mal uso conjunto puede afectar negativamente a la salud. Las benzodiacepinas y los opioides son dos de las drogas de las que más se abusa en Estados Unidos. Ambos fármacos son depresores del sistema nervioso central que actúan reduciendo la actividad cerebral y otras funciones vitales, como la frecuencia respiratoria. La mayoría de los profesionales de la medicina son extremadamente cautelosos a la hora de recetar los dos fármacos simultáneamente, pero muchos individuos hacen caso omiso de las advertencias y abusan de estos medicamentos de todos modos.

Los opioides y las benzodiacepinas tienen efectos secundarios que se solapan. Algunos de los efectos secundarios que pueden producirse como resultado de cualquiera de las dos clases de fármacos incluyen somnolencia, letargo, confusión y depresión respiratoria. Si se abusa de estas sustancias conjuntamente, estos efectos secundarios pueden verse exacerbados.

Si una persona es adicta a los opioides, su tolerancia empezará a aumentar, haciendo que su cuerpo anhele más y más la droga para producir los efectos que desea. Se sabe que las benzodiacepinas potencian los efectos de los opioides, lo que hace que sea una combinación de fármacos favorable para quienes sufren adicción a los opioides.

Cuando una persona ingiere un opioide, el cerebro libera un exceso de dopamina. Esto produce un efecto adormecedor y eufórico, al tiempo que se suprime la respiración. Las benzodiacepinas actúan de forma similar, ya que funcionan como sedantes para calmar los nervios de la persona y suprimir la respiración. Cuando fármacos como la oxicodona y el Xanax se consumen al unísono, la función cognitiva se ve muy afectada porque se produce una reducción del flujo sanguíneo al cerebro y la frecuencia respiratoria puede descender a niveles gravemente bajos.

Riesgos potenciales

Tanto las benzos como los opiáceos conllevan un alto potencial de abuso por separado, por lo que cuando se combinan, el potencial de abuso y los riesgos para la salud aumentan considerablemente. Cuando se abusa de estos fármacos juntos durante un periodo de tiempo prolongado, se puede producir el daño de órganos vitales, pérdida de memoria e incluso daño cerebral.

Dado que tanto las benzodiacepinas como los opioides son depresores del sistema nervioso central, la mezcla de fármacos como el Xanax y la oxicodona aumenta el riesgo de una sobredosis. Aproximadamente el 30% de las sobredosis de opioides están relacionadas con las benzodiacepinas. Además, el riesgo de sobredosis es 10 veces mayor en las personas que consumen tanto benzos como opioides que si la persona sólo toma uno de los dos tipos de fármacos.

Las señales de que una persona puede estar sufriendo una sobredosis de opioides y benzos incluyen:

• Mareos severos
• Respiración lenta
• Labios o dedos azules
• Pupilas puntiformes
• Insensibilidad
• Ruidos profundos de gorgoteo o resoplido

Cómo puede ayudar el tratamiento

Aunque la abstinencia de opioides no suele ser mortal, cuando se ha abusado de los opioides y las benzos de la mano, una persona puede sufrir convulsiones o ataques cuando no se toman estos medicamentos. Si usted o un ser querido está sufriendo una adicción a las benzodiacepinas y a los opioides, la mejor manera de comenzar el proceso de recuperación es a través de la desintoxicación médica para garantizar la comodidad y la seguridad durante el período de abstinencia.

La rehabilitación de drogas puede ayudar a aprender a vivir sin el uso de drogas adictivas como la oxicodona, la heroína, el Xanax o el Valium. La rehabilitación tendrá un enfoque clínico, utilizando varios métodos de terapia para ayudarle a descubrir las causas y condiciones subyacentes de su abuso de sustancias. Llámenos y comience su viaje hacia la recuperación hoy mismo.