Por qué la reina Isabel no asistió a la boda del príncipe Carlos y Camilla

Aunque sería fácil suponer que la reina no aprobaba el matrimonio de Carlos y Camilla, y que por ello se negó a asistir a la boda, debido al escándalo que la pareja provocó en la familia real con su romance, en realidad no es así. De hecho, según la información disponible públicamente, todo apunta a que la reina estaba feliz de que su hijo estuviera finalmente con la mujer que ama.

Según The Telegraph (vía The Daily Express), la reina Isabel sí aprobó el matrimonio de Carlos y Camilla. Fue la anfitriona de una lujosa recepción para ellos después de su boda y dio un sentido discurso durante el cual reconoció su accidentado camino para estar juntos, diciendo: «Han salido adelante y estoy muy orgullosa y les deseo lo mejor.» Su ausencia en la ceremonia no fue, evidentemente, personal.

En realidad, la reina Isabel no asistió a la boda de Carlos y Camilla debido a su papel como cabeza de la Iglesia de Inglaterra. Según The Telegraph (vía The Daily Express), los deberes de la reina pesaron más que las obligaciones familiares a la hora de tomar esta decisión. El Príncipe Carlos y Camilla, como divorciados, tuvieron una ceremonia civil, en lugar de una boda en la Iglesia de Inglaterra. La Iglesia considera que el matrimonio es un compromiso para toda la vida y desaconseja el divorcio (vía The Sun). El papel de la Reina como cabeza de la Iglesia significa que debe defender sus valores.

Sin embargo, tal y como señala The Daily Express, la Reina sí asistió a la boda del príncipe Harry y Meghan Markle en 2018, a pesar de que Markle ya había estado casada anteriormente. En ese momento, el mayordomo real reveló que el aparente cambio de prioridades de la Reina se debió a que el divorcio se ha vuelto más aceptado dentro de la Iglesia en los años posteriores a la boda de Carlos y Camilla.