12 maneras de mantener y mejorar su Qi a medida que envejece
Para entender el proceso de envejecimiento desde la perspectiva de la Medicina Tradicional China (MTC), primero hay que entender el concepto de qi (pronunciado «chee» ).
El qi se traduce mejor como «energía vital», «fuerza animadora» o «aliento sutil». Según la filosofía china, el qi es el sustrato del universo viviente. Es la energía vital que está presente en todos los seres vivos. Este concepto es relativamente nuevo en nuestra cultura occidental moderna, aunque estamos familiarizados con las ideas de «mojo» en las películas de Austin Powers y «la fuerza» en La Guerra de las Galaxias. También tiene homólogos en otras culturas. Por ejemplo, es similar al concepto hindú de prana y al concepto esotérico europeo de éter.
El flujo del qi es análogo al flujo del agua. En el cuerpo, fluye a través de canales invisibles similares a los vasos sanguíneos. A través de una cuidadosa observación y anotación durante cientos de años, los antiguos chinos desarrollaron un mapa del sistema energético del cuerpo. En el cuerpo, los canales de energía conocidos como meridianos se conectan a los órganos internos para que el qi de los órganos fluya a sus partes corporales asociadas.
Para estar sana y equilibrada, una persona debe tener un qi amplio, y el qi debe fluir libremente por todo el cuerpo sin bloqueos. Cuando el qi se vuelve deficiente o se bloquea, aparecen las enfermedades y el dolor.
En el cuerpo humano, el qi proviene de tres fuentes:
La primera fuente, el qi prenatal, se hereda de nuestros padres en la concepción. Muchas afecciones congénitas se clasifican como trastornos del qi prenatal. El qi prenatal se almacena en los riñones y actúa como una cuenta de ahorros. Está disponible para ser retirado cuando sea necesario, pero es difícil de reponer.
La segunda fuente de qi proviene de la esencia de los alimentos digeridos. Conocida como qi de grano, se obtiene mejor de los alimentos frescos de alta calidad.
La tercera fuente de qi, apropiadamente llamada qi de aire, proviene de la esencia del aire inhalado. Se obtiene del aire limpio y con una respiración abdominal adecuada y ejercicio aeróbico.
El qi obtenido de los alimentos y el aire actúan como una cuenta corriente vinculada a nuestra cuenta de ahorros de qi prenatal. Si mantenemos un saldo positivo en nuestra cuenta corriente comiendo bien, respirando aire limpio y llevando un estilo de vida moderado, utilizamos menos nuestros ahorros prenatales. Cuando nuestro qi prenatal se agota, morimos.
¿Cómo funciona el qi en el cuerpo?
El qi realiza las siguientes funciones fisiológicas en el cuerpo:
- Protege contra las entidades causantes de enfermedades creando una capa de protección que rodea el cuerpo.
- Transforma la esencia de los alimentos en sangre, sudor, orina y otros fluidos.
- Mantiene la temperatura normal del cuerpo.
- Mantiene los órganos en su lugar adecuado y detiene la fuga indebida de fluidos corporales (por ejemplo, sudoración o micción excesiva).
Muchos de los síntomas asociados con el envejecimiento, como la aparición de moretones con facilidad, la sensación de calor o frío inapropiado (o excesivo), la sequedad corporal, el prolapso de los órganos, la fatiga y la micción frecuente están directamente relacionados con una falta de qi que afecta a la función corporal.
¿Qué se puede hacer para mantener o complementar el qi?
El qi disminuye de forma natural con la edad. La energía juvenil que vemos en los niños no puede mantenerse. Sin embargo, todos conocemos a personas que parecen, actúan y se sienten más jóvenes que su edad cronológica. Estas personas tienen un qi más fuerte. Ciertamente, algunas personas han heredado un qi prenatal más fuerte que otras, pero gran parte de que vivamos una vida larga y saludable está bajo nuestro control. Las opciones de estilo de vida, incluyendo una nutrición adecuada, el ejercicio y la respiración profunda, pueden mejorar nuestra salud y alargar nuestra vida al complementar nuestro qi prenatal con qi de grano y aire de buena calidad.
A continuación se presentan algunas pautas de estilo de vida para ayudarle a mantener y mejorar su qi:
- Consuma alimentos frescos de buena calidad-orgánicos, si es posible.
- Evite los alimentos procesados, enlatados o cargados de conservantes.
- Consuma cereales integrales como el arroz integral, la quinoa, el amaranto o el mijo. Todos ellos son grandes fuentes de qi.
- Las carnes orgánicas de alta calidad, consumidas con moderación, son excelentes tónicos de qi.
- Evite un exceso de verduras crudas. Cocinarlas aumenta la disponibilidad del qi para el cuerpo. Pruebe a cocinarlas ligeramente al vapor o salteadas.
- Evite los azúcares procesados y el exceso de gluten (que se encuentra en el pan), que pueden crear condiciones de «humedad» en el cuerpo e impedir el flujo de qi.
- Use sólo aceites de buena calidad. Evite las grasas trans, que se encuentran en los aceites parcialmente hidrogenados.
- Evite los estimulantes como la cafeína, que dan al cuerpo un impulso temporal de energía, mientras agotan el qi prenatal. El consumo de estimulantes también puede conducir a un ciclo de dependencia.
- ¡Ejercite regularmente! El ejercicio aumenta la circulación del qi y la sangre, y nos permite recoger más qi del aire a través de los pulmones.
- Evite otros factores que agotan el qi, entre los que se incluyen el estrés, la falta de sueño, el exceso de trabajo, las drogas recreativas, el exceso de alcohol y el tabaco. El qi también se agota con la eyaculación excesiva (en los hombres) y el parto (en las mujeres).
- Controlar las emociones. Las emociones incontroladas, como la preocupación excesiva, la ira, la tristeza, el miedo o el vértigo, agotan el qi.
- ¡Trate de vivir una vida feliz!
La acupuntura y la fitoterapia china pueden ser muy útiles para complementar el qi y ayudar a devolver el equilibrio al cuerpo. Ponte en contacto con un acupuntor autorizado para una evaluación personalizada.
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