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Anacondas: La caza de la orquídea de sangre

Un equipo de investigadores financiado por una empresa farmacéutica neoyorquina, Wexel Hall, entre los que se encuentran el doctor Jack Byron, Gordon Mitchell, Sam Rogers, Gail Stern, Cole Burris y el doctor Ben Douglas, parten hacia una selva de Borneo en busca de una flor llamada Perrinnia Immortalis, que creen que puede utilizarse como una especie de fuente de la juventud. Aunque su guía, el capitán Bill Johnson, y su compañero Tran Wu tienen recelos, Jack les convence de tomar un camino poco seguro. El equipo pasa por una cascada y tiene que vadear el río. Una anaconda gigante emerge del agua y se traga a Ben entero, pero el resto del equipo escapa del río. Bill les asegura que es la serpiente más grande que ha visto nunca y que tardará semanas en volver a tener hambre. Sin embargo, la mayoría del equipo exige que se cancele la expedición. Viajan hasta el amigo de Bill, John Livingston, que vive en el río, para ver si Bill puede pedirle prestada su barca, pero encuentran a Livingston muerto y su barca destrozada.

Se encuentran en una pequeña aldea nativa formada por cabañas de paja y una anaconda destripada con un par de piernas humanas colgando del abdomen de la serpiente. El equipo se da cuenta de que las serpientes tienen un tamaño inusual porque su vida se ha prolongado gracias a las orquídeas, que forman parte de la cadena alimentaria local. Jack dice que, puesto que deben estar cerca de las orquídeas, deben seguir adelante, aunque los demás sostienen que no hay pruebas de que las orquídeas tengan el mismo efecto sobre los humanos. Queriendo marcharse, empiezan a construir una balsa de escape.

Gordon descubre la radio y el arma de Livington y se da cuenta de que podrían haber pedido ayuda hace tiempo. Jack es incapaz de convencerle de que permita continuar con la expedición, por lo que paraliza a Gordon utilizando una araña venenosa. Cuando Jack se une a los demás en la balsa, Sam descubre a Gordon y la picadura de la araña. Una anaconda desciende de las vigas y se traga vivo a Gordon poco después de salir del edificio. Los demás llegan justo cuando termina, así que Bill prende fuego al edificio con la esperanza de matar a la anaconda, pero se da cuenta de que ya ha escapado. Jack aprovecha la conmoción para robar la balsa.

Sin más material para hacer otra balsa, atraviesan la selva a hachazos para llegar antes que Jack a las orquídeas y recuperar su balsa. En el camino caen en una cueva tratando de escapar de una anaconda. Cole se pierde y entra en pánico tras encontrar un esqueleto. Se encuentra con el compañero de Bill, Tran, y cuando regresan con los demás, Tran es arrastrado hacia abajo y Cole intenta encontrarlo, pero Tran es devorado. Bill trata de encontrar a Cole y Tran, pero también se da cuenta de que la linterna perdida de Tran flota con su sangre rodeándola. El aterrorizado Cole escapa de las cuevas detrás del grupo, segundos antes que la serpiente, que le sigue por el agujero y se queda atascada. Sam utiliza un machete para decapitarla, pero otra serpiente captura a Cole. El equipo lo sigue y lo encuentra constreñido, pero aún vivo. Bill lanza su cuchillo y empala a la serpiente por la cabeza, matándola y liberando a Cole.

El grupo encuentra la balsa justo cuando Jack encuentra las orquídeas de sangre, colgando precariamente sobre un pozo en el que una bola de anacondas macho se está apareando con la reina. Jack dispara a Bill en el brazo y obliga al grupo a acompañarle hasta las orquídeas. Hace que Sam cruce la fosa a través de un delgado tronco para llenar una mochila con orquídeas. Al regresar, el tronco se rompe. Jack le ordena que le tire la mochila, pero Sam le amenaza con tirar las flores al pozo si no suelta el arma. El tronco se rompe, y ella cae, colgando de su pierna a mitad de camino en el pozo. Mientras los demás tratan de ayudarla, Jack intenta recuperar la mochila. La araña que utilizó para paralizar a Gordon se escapa de su frasco y lo muerde. Jack cae en el pozo y es devorado. La liana que sujeta a Sam también cede y ella también cae al pozo, pero está viva. Sale justo a tiempo cuando una de las anacondas intenta cogerle los pies.

La anaconda hembra se fija en ellos, pero Gail la engaña para que muerda su contenedor de combustible. Bill intenta disparar a la serpiente, pero el arma está vacía. Cole le dispara con una bengala, provocando una reacción en cadena que prende fuego a la anaconda y mata a las demás serpientes, destruyendo también las orquídeas de sangre. Los supervivientes, Bill, Sam, Cole y Gail, consiguen volver a la balsa y dirigirse a Kota Bharu.

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