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Cómo diferenciar el amor y la amistad

la diferencia entre el amor y la amistad

El amor y la amistad son dos sentimientos muy fuertes que son a la vez similares y claramente diferentes el uno del otro.

Puede que tengas sentimientos románticos hacia tu amigo o puede que sólo sientas amistad hacia tu novia o novio. No es fácil estar seguro cuando no sabes realmente cómo diferenciar entre ambos.

Ya sea en la amistad o en el amor, los sentimientos están muy presentes y son muy fuertes. Amas a esa persona y quieres pasar tiempo con ella y mantener una fuerte conexión. Pero, ¿hasta qué punto se puede llamar a esto amistad y cuándo es más una cuestión de amor?

¿Cómo diferenciar el amor de la amistad?

Si te estás haciendo esta pregunta, puede ser porque no sabes realmente si sientes amor o amistad por ella o por él.

Aquí tienes por qué te sientes solo – Y qué hacer al respecto ahora mismo

No hay tanta diferencia entre la amistad y el amor

La idea de la amistad es el apoyo y un fuerte vínculo. Los amigos tienen un fuerte vínculo y se apoyan mutuamente, pase lo que pase. Con tus amigos, ríes, lloras, hablas, escuchas… básicamente, haces todo lo que te gusta, juntos. Cada uno confía y respeta al otro. Cuando las cosas van bien o van mal, lo compartes con tus amigos.

Cuando se trata de amor, es lo mismo. Salvo que tienes que añadir el aspecto sexual que no forma parte de la amistad. Se supone que dos amigos no deben sentir deseo sexual hacia el otro. Dos amantes, en cambio, sí. Digamos que en el amor se encuentran todos los mismos códigos que en la amistad, junto con el sexo.

Hay que analizar la intensidad de las emociones. Por ejemplo, un amigo nunca ocupará tanto tus pensamientos como alguien de quien estás enamorado. Durante el día, no vas a pensar en tu amigo y decir «¡Oh, realmente quiero hacer el amor con él/ella!»

También tienes que tomar nota de tu comportamiento, físicamente hablando. Si tu corazón late más rápido y de repente estás más caliente en su presencia, deberías empezar a preguntarte qué sientes realmente por esa persona. Está claro que si te sientes así, sientes algo más que amistad hacia ellos.

Además, cuando quedas con un amigo, no te preocupas necesariamente por cómo vas vestido o por tu aspecto en general. En cambio, si quedas con alguien de quien estás enamorado, entonces querrás estar lo mejor posible y no ir vestido y arreglado al azar.

Cuando lo piensas, empezamos a cuestionar la amistad entre un hombre y una mujer incluso cuando somos adolescentes. Es una cuestión legítima porque nos damos cuenta de que nos llevamos bien con una persona del sexo opuesto pero que a veces también queremos besarla en los labios o hacer el amor con ella. Esta cuestión puede seguir persiguiéndonos como adultos. Acabamos con tres posibles resultados:

Simplemente amistad, sin deseo sexual o romántico.

Cada persona está contenta en esta amistad y no busca nada más. Y si de repente uno de los dos empieza a tener sentimientos más románticos que de amistad, no tendrán problema en hablarlo con el otro, ya sea para cambiar su relación a la de amantes, o para aclarar las cosas y seguir siendo los excelentes amigos que ya son.

Una amistad en la que uno de los amigos tiene sentimientos románticos por el otro; estos sentimientos románticos no son recíprocos.

Aquí las cosas se complican, por supuesto. Para el amigo que no tiene sentimientos románticos, la amistad parece fantástica y maravillosa. En cambio, para el amigo que tiene los sentimientos románticos, este amor no correspondido acaba siendo una fuente de sufrimiento. La mayoría de las veces, la persona que está enamorada no declarará sus sentimientos por su amigo, para no arriesgarse a perderlo. Desgraciadamente, esta persona optará por callar sus sentimientos para mantener una relación que nunca se convertirá en amor.

La amistad en la que los amigos están enamorados el uno del otro pero no admiten sus sentimientos, por diversas razones.

Esto seguramente te hará pensar en las películas románticas. Los dos amigos no admitirán lo que sienten y si encima son tímidos, acabarán distanciándose. O, en el mejor de los casos, se atreverán a decirse lo que sienten y transformarán su amistad en una verdadera historia de amor, auténtico final de Hollywood.

Amistad vs. Amor: Diferentes señales que pueden ayudarte a reconocer y distinguir cada una

Como se dijo anteriormente, lo que separa principalmente al amor y a la amistad es el aspecto sexual entre las dos personas. En la amistad no existe el deseo sexual, mientras que en el amor sí.

Cuando estás enamorado, quieres hacer planes con el otro, avanzar juntos, hacer todo juntos. Quieres cuidarte para complacer a la persona que amas y seguir seduciéndola.

Con los amigos, no te importa salir de casa con el pelo desordenado y sin maquillaje. Y la idea de irte a la cama con tu amigo te hace más gracia que otra cosa. (Y puede que incluso te dé asco)

También es cierto que eres menos exigente con tu amigo que con la persona de la que estás enamorado. Por ejemplo, que uno de ellos llegue tarde o no te coja la llamada… ¡ya sabes a lo que me refiero!

Así que, sí, la amistad puede considerarse una forma de amor, pero de nuevo, sin el aspecto del sexo y la seducción.

A veces, puede que creas que tienes sentimientos románticos por tu amigo, pero en realidad, una vez que intentáis ser amantes, te das cuenta de que sólo era algo pasajero. Esto puede suceder, y está bien si ambas personas se dan cuenta al mismo tiempo. Eso da lugar a una historia divertida más adelante. En cualquier caso, lo mejor es que las dos personas estén en la misma onda. De lo contrario, hay un gran riesgo de sufrimiento y malestar en tu relación.

Y tú qué?

Si estás aquí es porque te estás haciendo algunas preguntas sobre la verdadera naturaleza de tus sentimientos hacia un amigo en particular.

Es bueno cuestionarse las cosas, y es aún mejor estar informado para poder ver las cosas con más claridad. Ten por seguro que no hay nada extraño en tener dudas respecto a tus sentimientos hacia alguien. Ahora, el objetivo es saber qué quieres tú y qué quiere esa otra persona.

Tú eres la única persona que puede responder a eso. Tal vez aceptes quedarte en el escenario de la amistad/amor guardando tus sentimientos para ti y sufriendo en silencio.

Tal vez decidas hablar con tu amigo de tus sentimientos y ver qué pasa, arriesgándote a perder a este amigo. Tal vez admitas tus sentimientos y veas que tu amigo siente lo mismo, y vuestra relación se transforme en una relación romántica.

Decidas lo que decidas hacer, tienes que hacer de ti mismo y de tu bienestar una prioridad. Pero vas a tener que elegir y actuar según las consecuencias, independientemente. Dígase a sí mismo que si, por desgracia, su amigo no comparte sus sentimientos románticos, puede ser mejor tomar cierta distancia para protegerse y no experimentar un sufrimiento que no merece.

Por supuesto, esto no significa que su amigo sea una mala persona, ni mucho menos.

No puede obligar a alguien a sentir lo mismo que usted. Por otro lado, tendrás que cuidarte y limitar tu sufrimiento tomando cierta distancia. No hay razón para sufrir por nada.

Ahora bien, también puede resultar que este periodo de cuestionamiento sea algo pasajero y te des cuenta de que no, no estás enamorado de esa persona. ¡Uf! ¡Qué alivio! En este caso, no hay problema, vuestra amistad puede continuar como si no pasara nada, y todos estaréis contentos y aliviados. Y luego, si los dos acabáis dándoos cuenta de que sois algo más que amigos, os alegraréis de haber admitido vuestros sentimientos el uno al otro.

La vida merece el esfuerzo de ser vivida con algunos riesgos, y admitir tus sentimientos a alguien es un riesgo que puede merecer la pena. De ti depende decidir si estás preparado para posiblemente perder o ganar esa amistad con esa persona.

En resumen, para saber diferenciar el amor de la amistad, hay que tener en cuenta los aspectos de seducción y deseo sexual. En la amistad, estos no existen. En el amor, son inevitables.

Independientemente del tipo de relación, los sentimientos deben ser recíprocos. De lo contrario, una de las dos personas implicadas estará sufriendo por no tener lo que realmente quiere.

No tengas miedo de decirle a tu amigo lo que sientes. Si habéis sido amigos hasta ahora es porque podéis confiar, escuchar y entender al otro. El resultado no depende de ti y nadie te obligará a hacer nada que no sea bueno para ti. Recuerda siempre cuidar y tomar las mejores decisiones para ti.

¿Te has enamorado alguna vez de un amigo? Qué ha pasado? Cuéntanoslo.

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