Cómo funciona el Cuerpo de Paz
Los posibles voluntarios del Cuerpo de Paz pueden encontrar un reclutador o un evento de reclutamiento aquí. La solicitud para el Cuerpo de Paz es un proceso bastante extenso que comienza con el llenado de una solicitud. La solicitud contiene preguntas muy detalladas sobre las experiencias de trabajo y voluntariado y exige mucha diligencia a la hora de informar sobre cualquier afición o actividad, ya que esas habilidades podrían ser útiles para el Cuerpo. También hay que escribir dos ensayos.
Después de enviar la solicitud, se contactará con el solicitante para concertar una entrevista. La entrevista es una parte vital del proceso: los reclutadores intentan utilizarla para descartar a los solicitantes que no es probable que completen su período de servicio, y también para tener una idea de las áreas en las que los intereses y las habilidades del solicitante podrían complementar los objetivos del Cuerpo de Paz.
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Los solicitantes seleccionados son entonces nominados por su reclutador para unirse al Cuerpo de Paz. Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer. El candidato debe superar los obstáculos médicos y legales. Algunas condiciones médicas impiden el ingreso en el Cuerpo de Paz, mientras que otras pueden restringir las naciones en las que el candidato puede trabajar o retrasar su ingreso en el Cuerpo hasta que la condición haya desaparecido o se haya estabilizado.
Una vez obtenidas todas las autorizaciones, el candidato recibirá una invitación oficial para unirse al Cuerpo de Paz, con sólo 10 días para decidir si acepta o rechaza. La invitación incluirá información general sobre el despliegue del candidato, una región del mundo a veces imprecisa a la que será enviado (por ejemplo, Asia) y una descripción de su trabajo como voluntario. Una vez aceptada la invitación, se le proporciona información más específica. El candidato recibe una fecha de salida, una cita para una orientación previa a la partida y, a continuación, se le envía para el período de formación de tres meses en el país.
Aunque se tiene en cuenta el interés de un solicitante en servir en una parte concreta del mundo, la capacidad del Cuerpo de Paz para utilizar las habilidades de una persona concreta en una región determinada es más prioritaria. En otras palabras, el Cuerpo te enviará donde te necesiten.
Ciertas habilidades hacen que los solicitantes del Cuerpo de Paz sean más competitivos. Aunque cada voluntario recibe formación en las habilidades que necesitará para realizar su trabajo, es crucial tener cierta experiencia en idiomas extranjeros (aunque a todos los voluntarios se les enseña el idioma del país en el que vivirán durante la formación), experiencia en voluntariado, capacidad para organizar y liderar a otros y experiencia trabajando en el mismo campo que su trabajo voluntario. Esto puede incluir aficiones. Por ejemplo, alguien interesado en el programa de silvicultura y agricultura del Cuerpo de Paz podría haber trabajado durante un verano en un centro de jardinería o en un servicio de paisajismo, o haber ayudado a plantar y cultivar un jardín comunitario.