Famosos disléxicos significa que

La ignorancia suele llevar al fracaso

La dislexia es un síndrome de múltiples y variados síntomas de lectura y no lectura que afecta a más de 40 millones de niños y adultos estadounidenses. Muchos de los que padecen dislexia y trastornos de aprendizaje y atención relacionados se dan cuenta muy pronto de que no son como sus compañeros. Sus dificultades de aprendizaje y coordinación, o torpeza, a menudo les llevan a ver mermada su autoestima, a hacer el ridículo, a ser acosados e incluso a sufrir bullying. A menudo se sienten tontos, deprimidos y aislados. Como resultado, uno puede preguntarse tristemente cuántos disléxicos superdotados y creativos se han visto bloqueados para realizar su destino y potencial genético. Con demasiada frecuencia, los niños con problemas de aprendizaje crecen y se convierten en adultos subempleados, abocados a ocupaciones rutinarias y sin salida de por vida. Algunos tienen dificultades para mantener familias y criar a sus hijos adecuadamente. Muchos caen en las drogas y el alcohol, e incluso en la delincuencia. Su pérdida y el coste para la sociedad son incalculables. Y, trágicamente, esta pérdida asombrosa era, y es, evitable.

Cómo se puede triunfar

Dado que la dislexia suele ser un trastorno autocompensante que a menudo puede superarse con tiempo, esfuerzo comprensión – y sobre todo tratamiento, es crucial proporcionar a los disléxicos historias de éxito de personas conocidas para que no se rindan – y de hecho perseveren. Así, por ejemplo, ha habido muchos disléxicos que han hecho enormes contribuciones a la humanidad. Entre ellos se encuentran famosos artistas, diseñadores, arquitectos, escritores, atletas, juristas, médicos, científicos y líderes políticos y empresariales.

Estos disléxicos de éxito aprendieron a superar o sortear sus barreras ocultas y frustrantes, lo que les permitió cumplir sus sueños y deseos. De hecho, su trastorno fue a menudo un catalizador del éxito, obligándoles a desarrollar y utilizar talentos ocultos. A menudo, sus características más cruciales para «salvar la vida» eran la determinación y la perseverancia, junto con una necesidad desesperada de demostrar que no eran tan tontos como se sentían en su interior. Como resultado, nunca se rindieron por muy difícil que pareciera la tarea que tenían por delante. Sus exitosas vidas, a pesar de la dislexia, nos demuestran que se pueden lograr «milagros compensatorios» siempre que los disléxicos sean alentados por padres cariñosos, profesores afectuosos y «sanadores» para que crean en sí mismos.

A continuación, una muestra inspiradora de algunos disléxicos famosos y exitosos autocompensados. Pero recuerde: por cada disléxico famoso o conocido, hay miles y miles más que lo han conseguido, a pesar de su trastorno. Desgraciadamente, hay millones que no lo han hecho – ¡que podrían haberlo hecho!

Debido a que muchos de los supuestos disléxicos famosos (es decir, Einstein, Edison, Da Vinci, etc.) fueron aparentemente reportados por error, por deseo o por datos incompletos, el Dr. Levinson pensó que valía la pena incluir aquí sólo a unos pocos individuos autocompensados con este trastorno – y sólo a un candidato probable.

Sin embargo, es importante señalar que la teoría del oído interno o de la CVS de la dislexia podría explicar fácilmente la existencia válida de todos los disléxicos de éxito de los que se ha informado -incluso los que parecen no demostrados o incluso falsos, por ejemplo, Einstein, Edison, Da Vinci, etc. Para los interesados, se han señalado otros cientos de famosos con posible dislexia, pero requieren una mayor validación.

Más lecturas:

• Dislexia mi vida: Información y consejos sobre la dislexia y los problemas de aprendizaje por un disléxico
• La leyenda del niño torpe que se convirtió en un genio

El poder de la imprevisibilidad

Debido a todas las variables no disléxicas que determinan el éxito o incluso el fracaso, ningún experto es capaz de predecir significativamente el futuro de los individuos -incluso en aquellos que muestran un talento temprano. Y es especialmente difícil hacer predicciones fiables en aquellos disléxicos que parecen «retrasados» o simplemente «vagos o estúpidos».

Pablo Picasso

Pablo Picasso se convirtió en un famoso icono del arte que marcó tendencias a pesar de, y sin duda debido a, su aparente dislexia. Nació en Malag España en 1881. Se dice que fracasó en la escuela parroquial debido a sus dificultades académicas y de lectura, pero su padre, un profesor de arte, le animó a desarrollar su evidente talento artístico innato. A lo largo de su carrera desarrolló un sentido único de la belleza y el estilo. Pablo pintaba las cosas como las veía o las sentía realmente: desordenadas, deformadas o inclinadas. Sus cuadros demostraron el poder de la imaginación «disléxica», así como la emoción y la creatividad crudas o primarias de la psique humana. Algunas de sus obras famosas son: Las señoritas de Avigon, Viejo con guitarra y Guernica.

Tom Cruise

Tom Cruise creció y triunfó a pesar de la pobreza, los frecuentes traslados, la inadecuada escolarización y la dislexia. No cabe duda de que le salvó su gran capacidad interpretativa, así como su tenaz determinación de superarse y prosperar, pasara lo que pasara.

Richard Branson

Richard Branson, fundador y presidente del grupo londinense Virgin, no pasó por la escuela con facilidad. De hecho, la escuela fue una especie de pesadilla para él. Sus calificaciones en los exámenes estandarizados eran pésimas, lo que en principio apuntaba a un futuro similar. A pesar de las dificultades y los retos que le planteaba su reconocida dislexia, sus dotes interpersonales y empresariales le llevaron al éxito.

Muchos otros directores generales también han reconocido su dislexia, como Bill Gates, Charles Schwab, etc.

Atletas con dislexia o LD

Atletas famosos como los olímpicos Bruce Jenner y Greg Louganis, así como la estrella del automovilismo Jackie Stewart, son disléxicos reconocidos por ellos mismos.

Aunque el Dr. Levinson demostró que la dislexia está causada por una disfunción del oído interno (CV) que suele afectar a la coordinación de la lectura y la escritura, así como a las habilidades sensoriomotoras relacionadas, es crucial entender que esta deficiencia es específica de la función. Así, por ejemplo, Bruce Jenner admitió que no podía leer ni escribir correctamente, pero estas deficiencias de coordinación motora no se evaluaron en las Olimpiadas. Incluso podría haber tenido una disfunción de tartamudez y articulación del habla, que no tenía, y aun así haber sido un campeón olímpico.

Lo mismo ocurre con otros atletas disléxicos que están dotados de ciertas habilidades motoras mientras demuestran deficiencias en otras. No hace falta ser un completo torpe para ser disléxico. Y la gran mayoría no lo son – como también lo demuestran los siguientes atletas declarados como disléxicos o LD:

• Henry Winkler, actor
• Steven Spielberg, director
• Mohammed Ali, boxeador de los pesos pesados del mundo
• Anne Bancroft, actriz
• Duncan Goodhew, nadador olímpico
• Magic Johnson, miembro del Salón de la Fama del Baloncesto
• Bob May, golfista
• Diamond Dallas Page, campeón mundial de lucha libre
• Steve Redrave, medallista de oro olímpico (remo)
• Nolan Ryan, lanzador de los Rangers de Texas

Dotados y famosos, a pesar de la dislexia – ideas valiosas

El tratamiento médico mejora frente a la disminución del funcionamiento de los superdotados Disminuye el funcionamiento de los superdotados

El Dr. Levinson ha examinado y tratado a muchos disléxicos famosos en su consulta. Su éxito es invariablemente inspirador, incluso antes del tratamiento. Y, en la mayoría de los casos, la terapia médica mejora significativamente su genialidad al tiempo que elimina o minimiza el funcionamiento disléxico, lo que invariablemente mejora la autoestima. En contra de los temores erróneos, los tratamientos médicos y no médicos que tienen éxito no obstaculizan la creatividad. De hecho, la terapia potencia la creatividad. Aunque muchos «expertos» creen o fantasean con que los disléxicos son más creativos que los no disléxicos y están «bendecidos» por su trastorno, la mayoría de los disléxicos famosos se sienten en cambio tontos y/o feos, considerándose simplemente impostores. A menudo se sienten como actores que engañan al público haciéndole creer que son competentes o que «no son tontos». En consecuencia, muchos disléxicos no están de acuerdo en que son bendecidos y no desean otra cosa que sentirse normales en lugar de excepcionales.

Interesantemente, hay artistas disléxicos con disgrafía que sólo saben dibujar caligrafía; médicos que no saben leer, deletrear y/o escribir bien; abogados que no saben calcular; incluso matemáticos que no saben sumar, restar y multiplicar mentalmente; músicos incapaces de leer música; deportistas torpes y propensos a los accidentes en áreas no dotadas; e incluso expertos en dislexia que no logran entenderla.

El estudio de los disléxicos superdotados, del pasado y del presente, revela ideas cruciales que a menudo se pasan por alto y/o se malinterpretan científicamente:

• La parte del cerebro responsable de causar la dislexia (el funcionamiento CV alterado) es diferente de la estructura cerebral responsable de las funciones de los superdotados en los individuos (la corteza cerebral o cerebro pensante).
• Una disfunción en una parte del cerebro (es decir, dislexia) puede desencadenar un funcionamiento compensador en otra zona del cerebro.
• El funcionamiento de los superdotados suele ser genético. Si está latente o inhibido, las funciones de superdotación pueden ser desencadenadas en lugar de ser creadas de nuevo por mecanismos compensatorios. En otras palabras, la dislexia no determina la creatividad y la genialidad. Sin embargo, la dislexia puede estimular la creatividad debido a la necesidad biológica de compensar la disfunción. Por el contrario, los factores emocionales secundarios desencadenados por la dislexia, que se traducen en el abuso de alcohol y drogas, así como en la depresión y la ansiedad, pueden impedir que afloren los mecanismos creativos. Esta observación subraya aún más la necesidad de la terapia: cuanto antes, mejor.
• Las tremendas diferencias de funcionamiento frente a la disfunción dentro de los disléxicos ponen de manifiesto la regla disléxica para todos: La dislexia es un síndrome de múltiples y variados síntomas de lectura y no lectura, muchos de los cuales pueden compensarse con el tiempo. Algunos disléxicos pueden leer bien, pero escribir, deletrear y calcular mal. Existen todas las combinaciones, por lo que no es razonable y es erróneo definir la dislexia sólo como un trastorno grave de la lectura.
• De hecho, hay artistas disléxicos que sólo pueden dibujar paisajes, pero otros sólo pueden hacer retratos… La lista de combinaciones funcionales y disfuncionales es tan interminable como fascinante. Esta visión refuta claramente la tendencia errónea a definir o presentar este trastorno complejo y multidimensional como sólo una dificultad severa de lectura.

Si usted va a lograr la maestría en el arte o el renombre científico como disléxico todavía depende de la adquisición de habilidades básicas de lectura y escritura – ¿por qué no llamar para una consulta gratuita hoy con el Dr. Levinson?