La prueba del gancho: No pase por alto una rotura del tendón del bíceps en el codo

La mayoría de nosotros estamos familiarizados con el músculo bíceps, especialmente aquellos que se dedican al entrenamiento con pesas. Por desgracia, el extremo inferior del bíceps en el codo puede romperse como resultado de ciertas lesiones. Para la mayoría de las personas, la reparación quirúrgica del bíceps desgarrado es la que más posibilidades tiene de recuperar la fuerza. Curiosamente, las roturas del bíceps del codo suelen pasar desapercibidas, incluso para los médicos experimentados. Esto se convierte en un problema, ya que la cirugía realizada tarde es más complicada y potencialmente menos exitosa. Existe una prueba relativamente sencilla y fiable, denominada «prueba del gancho», que se utiliza para diagnosticar las roturas del tendón del bíceps distal. Incluso puedes probarlo en ti mismo!

Los músculos de la parte anterior del brazo

Hay dos músculos en la parte anterior del brazo: el bíceps y el braquial. El braquial es más profundo y se conecta al antebrazo a través de un tendón plano que se une al cúbito, uno de los dos huesos del antebrazo. El bíceps es más superficial. Se llama bíceps («dos cabezas») porque tiene dos porciones. Una porción surge de la cavidad de la articulación del hombro, mientras que la otra surge de una prominencia en forma de dedo del omóplato llamada coracoides. Ambas porciones se fusionan al acercarse al codo y se conectan al antebrazo a través de un único tendón: el tendón del bíceps distal. Este tendón en forma de cuerda envuelve el otro hueso del antebrazo, el radio, uniéndose a él.

¿Cómo se rompe el tendón del bíceps?

La mayoría de las veces, el tendón del bíceps distal se rompe como resultado de una lesión. A menudo la lesión se produce por una extensión repentina del codo mientras el músculo bíceps se contrae. Imagínese que lleva un objeto pesado con los brazos, como una caja grande. Si la caja se cayera, y usted intentara detener su caída, el peso de la caja le llevaría el brazo hacia abajo mientras su bíceps sigue contraído, (tratando de sostener la pesada caja). Por lo general, el tendón se desprende limpiamente del hueso, y se puede sentir una sensación de desgarro. Esto provoca dolor y debilidad, y a veces el brazo y el antebrazo se vuelven negros y azules. Sin embargo, el dolor desaparece en unos días, y los demás músculos del brazo y el antebrazo compensan en cierta medida la lesión del bíceps. La persona lesionada puede optar por no ir al médico, pensando que el brazo sólo se ha tensado. Y como se ha mencionado, incluso los médicos experimentados pueden pasar por alto esta lesión cuando no la buscan específicamente.

La prueba del gancho

¿Quieres sentir tu propio tendón del bíceps? Coloca la palma de tu mano frente a tu cara como si estuvieras sujetando un móvil para leer su pantalla. Tu codo estará doblado 90 grados. Intenta enganchar el dedo índice de la mano contraria detrás de una estructura parecida a una cuerda en la parte delantera de tu codo: es tu tendón del bíceps. Puedes tirar de él con el dedo enganchado. Si el bíceps está roto, no se puede enganchar el dedo detrás de ninguna estructura, ya que el tendón braquial es plano. Por lo tanto, si alguien se lesiona como se ha descrito anteriormente, y no hay forma de enganchar un dedo detrás de una estructura parecida a una cuerda en la parte delantera del codo, puede apostar que esa persona acaba de sufrir una rotura del tendón del bíceps distal. Si enganchar un dedo detrás del tendón del bíceps distal es doloroso, puede haber una rotura parcial.

Otras pruebas útiles

Cuando el bíceps distal está roto, se pueden hacer otras observaciones. Como se ha mencionado antes, el brazo y el antebrazo pueden tener una decoloración negra y azul después de la lesión. Si la persona lesionada intenta hacer un músculo con ambos brazos, el contorno del bíceps del lado lesionado tiene un aspecto extraño: el vientre del músculo es alto y la parte inferior del brazo parece plana por delante. La distancia entre el pliegue de la piel en la parte delantera del codo y la parte más baja del vientre del músculo puede medirse en dedos, y será más larga en el lado de la rotura. La fuerza en la flexión del codo puede parecer casi normal, sin embargo, la debilidad en el giro de la palma de la mano hacia arriba (supinación) es más evidente. Se suelen obtener radiografías para descartar otras lesiones, pero estas roturas tendinosas no se pueden ver en las radiografías. La resonancia magnética (RM) muestra mejor las roturas, especialmente cuando la RM se realiza con el brazo por encima de la cabeza (posición de flexión-abducción-supinación o FABS).

¿Qué pasa después?

Sin cirugía, las roturas del tendón del bíceps distal no se curan. Algunos individuos pueden adaptarse a ella, pero la mayoría la encuentra molesta: el brazo se acalambra con el uso repetitivo y especialmente con ciertas actividades como afeitarse, usar un destornillador o girar el pomo de una puerta. La mayoría de los cirujanos de codo recomiendan la reparación quirúrgica del tendón roto, y los mejores resultados suelen obtenerse cuando la cirugía se realiza poco después de la lesión. Después de la cirugía, se recomienda un breve período de protección, iniciar pronto el entrenamiento con pesas y la mayoría de las personas pueden realizar actividades sin restricciones como máximo a los tres meses de la cirugía.

Si quiere saber más sobre las roturas del tendón del bíceps distal… Lesiones del tendón del bíceps distal