Efectos a largo plazo de los antibióticos: 5 Formas de Potenciar las Bacterias Saludables
Los antibióticos son una de las creaciones médicas más importantes e influyentes, pero su uso excesivo ha dado lugar a «superbacterias» resistentes a los antimicrobianos. Lo que supone una preocupación para la salud humana, animal y ambiental.
Matan las bacterias dañinas, pero como resultado también destruyen las bacterias útiles. Cuando se trata de la EII y el SII, los antibióticos pueden ser necesarios para combatir la infección, pero su uso incorrecto podría empeorar aún más los síntomas relacionados.
¿Qué tratan los antibióticos?
El término antibióticos significa:
» …cualquier sustancia química producida por un microorganismo que tiene la capacidad de inhibir el crecimiento de bacterias y otros microorganismos o de destruirlos.»
Los antibióticos funcionan contra las bacterias pero no contra los virus:
- Las bacterias son organismos vivos que existen como células individuales. En algunos casos son beneficiosas pero otras son perjudiciales, causando enfermedades e invadiendo el cuerpo, interfiriendo con los procesos corporales normales.
- Los virus no están vivos. Crecen y se reproducen sólo después de invadir células vivas. Su sistema inmunológico puede combatir algunos antes de que causen enfermedades, pero otros pueden necesitar seguir su curso en su cuerpo.
- Si experimenta síntomas relacionados con los antibióticos, pregunte a su médico
- Tome el tratamiento completo de antibióticos
- No tome antibióticos durante más tiempo del indicado
- No utilice los antibióticos sobrantes de recetas anteriores
- Se recopilaron datos de 577.627 niños con un tiempo medio de seguimiento de unos 5,5 años.
- La mayoría de los niños (84.8%) habían recibido al menos un ciclo de antibióticos.
- 117 niños habían desarrollado EII (50 enfermedad de Crohn y 67 colitis ulcerosa).
- Los investigadores descubrieron que los niños que habían tomado una prescripción de antibióticos tenían un 84% más de probabilidades de desarrollar EII durante el seguimiento que los que no lo habían hecho.
Los médicos que son más liberales con los antibióticos pueden recomendarlos cuando no están seguros de si una enfermedad es causada por una bacteria o un virus.
Efectos secundarios comunes de los antibióticos
El propósito de los antibióticos es combatir las infecciones bacterianas, pero ciertas personas experimentan efectos secundarios negativos.
Los efectos secundarios a corto plazo incluyen malestar estomacal, diarrea, pérdida de apetito, infecciones por hongos o aftas orales . Los síntomas graves incluyen reacciones alérgicas (dificultad para respirar, hinchazón de la garganta o la boca, diarrea severa acuosa o con sangre e infecciones por hongos.
Contacte con su médico si tiene efectos secundarios después de tomar antibióticos. Con el fin de evitar un mal uso, su médico puede mantenerle con el antibiótico y controlar los efectos secundarios, ajustar la dosis o ponerle un antibiótico diferente.
Si experimenta una reacción alérgica, como una erupción cutánea, o anafilaxia (dificultad para respirar, náuseas o vómitos intensos, mareos, aceleración del ritmo cardíaco e hinchazón de la cara, los labios o la lengua) llame inmediatamente a su línea de emergencias para recibir asistencia médica.
¿Qué es el uso excesivo de antibióticos?
El uso excesivo de antibióticos se produce cuando se utilizan cuando no son necesarios. Como resultado del uso excesivo de antibióticos, la resistencia a los antimicrobianos ha ido en aumento. Esto supone una grave amenaza mundial para la salud humana, animal y medioambiental. Uno de los resultados es la aparición de bacterias resistentes a los medicamentos, o «superbacterias».
La resistencia a los antimicrobianos se produce cuando los microorganismos (bacterias, hongos, virus, parásitos) se vuelven «más inteligentes» y «más fuertes» y desarrollan resistencia a los medicamentos. Como resultado, el medicamento no funciona y las infecciones no se tratan, aumentando el riesgo de propagación.
«En los animales destinados a la alimentación, los antibióticos se utilizan habitualmente en el ganado vacuno, el pollo y el cerdo y se prevé que en 2030 dicho uso aumente hasta un 67% en los países más poblados del mundo.»
Un estudio global mostró que el uso de antibióticos ha aumentado un 65%, entre 2010 y 2015, en 76 países . El uso excesivo de antibióticos se ha visto en animales, humanos, sin receta y debido al aumento de los viajes, a la mala sanidad y a través de los residuos de estiércol y heces de los animales que toman antibióticos.
Prevenga el uso excesivo de antibióticos
Enfermedad renal crónica: ¿podrían ser los antibióticos los culpables?
Un estudio de 2011 publicado en BMJ Journal sugirió una relación entre el uso de antibióticos y la EII. Se trataba de un estudio de cohortes danés a escala nacional que exploraba la relación entre el uso de antibióticos y la EII en los niños.
Los investigadores recopilaron datos de prescripción de antibióticos entre 1995 y 2004, incluyendo el tipo de antibiótico administrado, y todos los diagnósticos de EII registrados:
Tenga en cuenta que este estudio no prueba que la exposición a los antibióticos cause EII. Algo a tener en cuenta es que los niños pueden haber sido más propensos a que se les receten antibióticos debido a los síntomas de la EII, sin saber que tenían EII en ese momento.
Cómo potenciar tus bacterias saludables
El uso repetido de antibióticos se ha relacionado con la disminución de las bacterias intestinales saludables. Sin restaurar y reequilibrar sus bacterias intestinales, usted podría tener una salud intestinal comprometida, incluyendo una inmunidad deteriorada, problemas digestivos, aumento de las alergias y sensibilidades a los alimentos, aumento de la inflamación, problemas de estado de ánimo, e incluso luchas hormonales y de peso.
La investigación muestra que los antibióticos pueden destruir las bacterias saludables útiles y causar daños en el microbioma intestinal. Varias fuentes de evidencia sugieren el importante papel de la microbiota intestinal en el SII y la EII . Si has tomado antibióticos, es importante reconstruir tus bacterias saludables.
Nota que estas son recomendaciones generales. Si sufres de EII, es posible que tengas que tener más precaución cuando se trata de sensibilidades o reacciones a los alimentos, especialmente si estás considerando un brote. Consulte a su médico antes de cambiar su dieta.
Centrarse en los alimentos fermentados
Los alimentos fermentados son alimentos que han sido parcialmente descompuestos por microbios. Por ejemplo, en el yogur, las bacterias fermentan la lactosa (azúcar de la leche) para dar al yogur su textura más espesa y su sabor ácido. Otros ejemplos de alimentos fermentados son el queso, el chucrut, la kombucha, el kimchi, el kéfir y el miso.
Alimentar a las bacterias con fibra
La fibra alimenta a las bacterias sanas del intestino, lo que las ayuda a crecer y poblar. Los alimentos más ricos en fibra son los frutos secos, las semillas, las alubias y los cereales integrales. En particular, los alimentos prebióticos alimentan a las bacterias saludables. Entre ellos se encuentran los puerros, los plátanos, las manzanas, las semillas de lino, la cebolla y los espárragos.
Considere un probiótico de alta calidad
Según la Dra. Liz Lipski en su libro Digestive Wellness, busque uno con Lactobacilos y Bifidobacterias. Si tiene diarrea crónica, busque Saccharomyces Boulardii. Lo más importante es que las bacterias sigan vivas. Intenta comprar una marca de renombre que limite el procesamiento y realice pruebas de terceros.
Consume menos azúcar
Comer muchos alimentos procesados y azúcar añadido puede disminuir la cantidad de bacterias buenas en tu intestino. Una cantidad elevada de azúcar también se ha relacionado con un aumento de la inflamación, lo que empeora los síntomas de la EII.
Reduzca el estrés
Controlar el estrés es importante para todos los aspectos de la salud, incluida la salud intestinal. Algunos estudios han demostrado que los estresores psicológicos pueden alterar el equilibrio de los microbios. También cuando se administraron ciertas cepas de bacterias (Lactobacillus y Bifidobacteria) a personas que sufrían el síndrome de fatiga crónica, experimentaron una disminución de los síntomas de ansiedad.
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