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Por qué tu sistema nervioso te arruga los dedos

Foto: flickr/Sharron Drummond
Foto: Flickr/Sharron Drummond

Vuelves a casa muy cansado después de un largo día de trabajo y decides darte ese larguísimo baño que estabas esperando. Te quedas un rato en el agua y de repente te das cuenta de que se te arrugan los dedos. Vaya, eso te está diciendo que llevas un rato ahí y te recuerda todas las cosas que te quedan por hacer. Pero… ¿el cuerpo hace esto para hacernos saber que hemos estado demasiado tiempo en un baño? Cuál es la verdadera razón detrás de este proceso? Y ¿cómo se produce realmente?

Se suele suponer que la arruga de los dedos es el resultado de que el agua pasa de forma pasiva a la capa externa de la piel y hace que se hinche. Sin embargo, aunque todo el mundo parece creer esa explicación, en realidad es bastante errónea. Los investigadores saben desde los años 30 que la arruga de la piel no se produce cuando hay daños en los nervios de los dedos, lo que indica que no es un proceso pasivo, sino activo, controlado por los nervios 1. Es más, este conocimiento ha llevado a la implantación del Wrinkling Test, una prueba médica que comprueba las arrugas de los pacientes para evaluar su posible daño nervioso periférico 23. Estudios más recientes han demostrado que el arrugamiento de los dedos está controlado por el sistema nervioso simpático, una división del sistema nervioso periférico que también controla otras funciones corporales involuntarias como la respiración o la digestión. Sin embargo, aún no está claro cómo funciona todo el sistema y, lo que es más importante, por qué está ahí.

El funcionamiento de este sistema no está perfectamente claro, pero tenemos algunas pistas. En primer lugar, nuestras manos tienen que percibir el entorno acuático de una manera distintiva (no tenemos arrugas en los brazos, por ejemplo). La palma de la mano posee una cantidad increíble de glándulas sudoríparas, unas 370 por cm2. Cada una de esas glándulas tiene un pequeño conducto para llegar a la superficie de la piel y se cree que cuando éstas están bajo el agua, cierta cantidad de agua puede atravesar el conducto y llegar a la glándula del interior de la mano. Se cree que este proceso es percibido por el sistema nervioso simpático que, a su vez, reacciona reduciendo el flujo sanguíneo a través de los vasos del dedo. Ahora los vasos sanguíneos tienen la sangre restringida, lo que reduce su volumen, y esta situación hace que la piel se encoja hacia dentro, formando las arrugas que observamos después de tomar un baño 4.

La fisiología que hay detrás de este proceso es bastante sorprendente e implica una acción coordinada entre el sistema nervioso y el sistema circulatorio. Así que la pregunta obvia es: ¿Por qué se adquiere este proceso durante la evolución? Cuál es la ventaja de arrugar los dedos?

Algunos investigadores han comenzado a estudiar este fenómeno. El primer enfoque fue teórico y lo propusieron Mark Changizi y sus colegas en 2011 5. Proponen que las arrugas inducidas por la humedad han sido seleccionadas para mejorar el agarre en condiciones de humedad, es decir, uno debería ser capaz de recoger mejor los objetos mojados después de arrugarse los dedos. Changizi propone que las arrugas de los dedos funcionan como las bandas de rodadura de los neumáticos. Crean canales que permiten que el agua se escurra al presionar las yemas de los dedos sobre superficies mojadas, lo que permitiría a los dedos hacer un mejor contacto dándole un mejor agarre.

Figura 1. Los neumáticos lisos, como el de competición (izquierda), proporcionan el mejor agarre en condiciones secas. Sin embargo, en condiciones de humedad las bandas de rodadura de lluvia (derecha) son mejores. La hipótesis propuesta por Changizi et al sugiere que, aunque las puntas de los dedos lisas proporcionan el mejor agarre en condiciones secas, las puntas de los dedos se arrugan en condiciones húmedas para mejorar el agarre, de forma similar a las bandas de rodadura de la lluvia.
Figura 1. Los neumáticos lisos, como los de competición (izquierda), proporcionan el mejor agarre en condiciones secas. Sin embargo, en condiciones de humedad las bandas de rodadura de lluvia (derecha) son mejores. La hipótesis propuesta por Changizi et al sugiere que, aunque las puntas de los dedos lisas proporcionan el mejor agarre en condiciones secas, las puntas de los dedos se arrugan en condiciones de humedad para obtener un mejor agarre, de forma similar a las bandas de rodadura de la lluvia.

Unos años más tarde, otro estudio pretendía comprobar experimentalmente la predicción de que la manipulación de objetos sumergidos es más eficiente con los dedos arrugados que sin ellos. Para ello, reclutaron a participantes y les pidieron que metieran las manos en agua caliente durante 30min o que las mantuvieran secas. Después, los participantes tuvieron que mover canicas de vidrio secas o húmedas (sumergidas) de diferentes tamaños de un recipiente a otro 6.

Fig2
Figura 2. Montaje experimental para comprobar si el arrugamiento de los dedos supone una ventaja en la manipulación de objetos húmedos. Los participantes tienen que transferir canicas de vidrio secas o sumergidas de diferentes tamaños de un recipiente a otro. El arrugamiento de los dedos se induce antes del experimento sumergiendo las manos de los participantes en agua caliente durante 30 minutos. Se observa una reducción significativa del tiempo de manipulación si se ha inducido previamente el arrugamiento de los dedos (gráfico de la derecha). | Crédito: Changizi et al (2011)

Tras analizar los datos, los investigadores descubrieron que el tiempo que se tardaba en transferir las canicas de vidrio mojadas se reducía si los participantes habían tenido los dedos en agua previamente, lo que sugiere que la hipótesis de Changizi era correcta y que el arrugamiento de los dedos ayuda a la manipulación de los objetos mojados, lo que concordaría con la idea de que este proceso podría ser evolutivamente favorable y podría haber sido seleccionado a lo largo de los años. Sin embargo, existe cierta controversia ya que el tamaño de la muestra del estudio era bastante pequeño (sólo 20 participantes). Para reproducir los resultados, otro grupo intentó hacer los mismos experimentos en una cohorte mayor (40 participantes). Lamentablemente, los resultados no fueron reproducibles y este segundo laboratorio no pudo concluir que el arrugamiento de los dedos fuera realmente una ventaja para manipular objetos húmedos 7 por lo que ahora mismo hay un poco de incertidumbre sobre la verdadera razón de este proceso.

De todas formas, la comunidad científica sigue pensando que debe haber una razón detrás de este proceso de arrugamiento. Por qué el sistema nervioso debería controlar el arrugamiento de los dedos inducido por el agua? La respuesta es: no lo sabemos realmente, así que tenemos que hacer más investigación!

  1. O’Riain S (1973) New and simple test of nerve function in hand. Br Med J 3: 615-616. doi:10.1136/bmj.3.5881.615
  2. Vasudevan TM, van Rij AM, Nukada H, Taylor PK (2000) Skin wrinkling for the assessment of sympathetic function in the limbs. Aust N Z J Surg 70: 57-59. doi:10.1046/j.14401622.2000.01744.x
  3. Tindall, A., Dawood, R., & Povlsen, B. (2006). El caso del mes: La prueba de las arrugas de la piel: una sencilla prueba de lesiones nerviosas para pacientes pediátricos y poco cooperativos. Emergency medicine journal, 23(11), 883-886. doi:10.1136/emj.2005.031377
  4. Wilder-Smith, E. P., & Chow, A. (2003). La arruga por inmersión en agua se debe a la vasoconstricción. Muscle & nerve, 27(3), 307-311. doi:10.1002/mus.10323
  5. Changizi, M., Weber, R., Kotecha, R., & Palazzo, J. (2011). ¿Son los dedos arrugados inducidos por la humedad huellas de lluvia de los primates? Brain, behavior and evolution, 77(4), 286-290. doi:10.1159/000328223
  6. Kareklas, K., Nettle, D., & Smulders, T. V. (2013). Las arrugas de los dedos inducidas por el agua mejoran la manipulación de objetos húmedos. Biology letters, 9(2), 20120999. doi: 0.1098/rsbl.2012.0999
  7. Haseleu, J., Omerbašić, D., Frenzel, H., Gross, M., & Lewin, G. R. (2014). Las arrugas de los dedos inducidas por el agua no afectan a la agudeza táctil ni a la destreza en la manipulación de objetos húmedos. PloS one, 9(1), e84949. doi:10.1371/journal.pone.00849

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