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Riesgos de cáncer de pulmón para los no fumadores

No todas las personas que padecen cáncer de pulmón fuman. Hasta un 20% de las personas que mueren de cáncer de pulmón en Estados Unidos cada año no han fumado nunca ni han consumido ninguna otra forma de tabaco. Sin embargo, el cáncer de pulmón en personas que nunca han fumado es uno de los cánceres más mortales en Estados Unidos.

Si bien es cierto que mantenerse alejado del tabaco es lo más importante que cualquiera de nosotros puede hacer para ayudar a reducir el riesgo de padecer cáncer de pulmón, también existen otros factores de riesgo. Algunos de los factores de riesgo del cáncer de pulmón pueden provocar cambios o mutaciones en las células pulmonares. Estos cambios pueden provocar un crecimiento celular anormal y, en ocasiones, cáncer. Algunas personas que padecen cáncer de pulmón no tienen factores de riesgo conocidos.

Los investigadores siguen avanzando en la comprensión de lo que puede causar cáncer de pulmón en personas que nunca han consumido tabaco:

  • Gas radón. El radón es un gas radiactivo que se produce de forma natural como resultado de la descomposición del uranio en el suelo y las rocas. En el exterior, hay tan poco radón que no es probable que sea peligroso. Pero si hay radón en el interior, puede estar más concentrado. Respirarlo puede aumentar el riesgo de cáncer de pulmón. Según la Agencia de Protección Medioambiental de los Estados Unidos (EPA), el radón es la segunda causa de cáncer de pulmón en este país, y es la principal causa entre las personas que no fuman. La Guía del ciudadano sobre el radón explica cómo hacer una prueba de radón en su casa de forma fácil y económica, así como qué hacer si los niveles son demasiado altos.
  • Humo de segunda mano. Cada año, unos 7.000 adultos mueren de cáncer de pulmón como resultado de respirar el humo de segunda mano. Las leyes que prohíben fumar en lugares públicos han ayudado a reducir este peligro. La Red de Acción contra el Cáncer de la Sociedad Americana del CáncerSM (ACS CAN) -la filial de defensa sin ánimo de lucro de la Sociedad Americana del Cáncer- está trabajando para ampliar y reforzar estas leyes para proteger aún más a las personas que fuman y a las que no lo hacen de los peligros del humo de segunda mano.
  • Agentes cancerígenos en el trabajo. Algunas personas están expuestas a carcinógenos (agentes cancerígenos) como el arsénico, el uranio, el amianto y los gases de escape de los motores diesel en su lugar de trabajo. La exposición laboral a estos materiales cancerígenos ha disminuido a medida que el gobierno y la industria han tomado medidas para ayudar a proteger a los trabajadores. Aun así, si trabaja cerca de estos agentes, tenga cuidado de limitar su exposición siempre que sea posible.
  • Contaminación del aire. En las ciudades, la contaminación del aire (especialmente cerca de las carreteras con mucho tráfico) parece aumentar ligeramente el riesgo de cáncer de pulmón.
  • Mutaciones genéticas (cambios). Ciertos cambios en las células pulmonares pueden provocar un crecimiento celular anormal y, en ocasiones, cáncer.

Cambios en el estilo de vida para reducir el riesgo

Las personas que no fuman evitan el mayor factor de riesgo de cáncer de pulmón. Pero pueden hacer algunos otros cambios en su estilo de vida para ayudar a reducir su riesgo aún más.

Además de comprobar la presencia de radón en su casa, evitar el humo de segunda mano y limitar la exposición a carcinógenos en el trabajo , seguir un patrón de alimentación saludable con una variedad de frutas y verduras también puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer de pulmón. Algunas pruebas sugieren que una dieta rica en frutas y verduras puede ayudar a proteger contra el cáncer de pulmón tanto a las personas que fuman como a las que no lo hacen.

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