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Terapia narrativa

Realización de la identidadEditar

El terapeuta narrativo se centra en ayudar a las personas a crear historias sobre sí mismas, sobre sus identidades, que les sean útiles. Este trabajo de «reautoría de la identidad» ayuda a las personas a identificar sus valores y a identificar las habilidades y conocimientos para vivir estos valores mediante el uso hábil del terapeuta de la escucha y el cuestionamiento. A través del proceso de identificación de la historia de los valores en la vida de las personas, el terapeuta y el cliente son capaces de ser coautores de una nueva historia sobre la persona:24

La historia que las personas cuentan sobre sí mismas y que se cuenta sobre ellas es importante en este enfoque, que afirma que la historia de la identidad de una persona puede determinar lo que cree que es posible para sí misma. El proceso narrativo permite a las personas identificar qué valores son importantes para ellas y cómo podrían utilizar sus propias habilidades y conocimientos para vivir estos valores.36

Esto incluye un enfoque en «resultados únicos» (un término de Erving Goffman) o excepciones al problema que no serían predichas por la narrativa o historia del problema en sí.

Externalizar las conversacionesEditar

El concepto de identidad es importante en la terapia narrativa. El enfoque pretende no confundir la identidad de las personas con los problemas que puedan enfrentar o los errores que hayan cometido. Más bien, el enfoque trata de evitar las nociones modernistas y esencialistas del yo que llevan a las personas a creer que existe un «verdadero yo» o una «verdadera naturaleza» determinados biológicamente. En su lugar, la identidad, vista como algo principalmente social, puede cambiarse en función de las elecciones que haga la gente.

Para separar las identidades de las personas de los problemas a los que se enfrentan, la terapia narrativa emplea conversaciones de externalización. El proceso de externalización permite a las personas considerar sus relaciones con los problemas; de ahí el lema narrativo: «La persona no es el problema, el problema es el problema.» Los puntos fuertes o atributos positivos de una persona también se externalizan, lo que permite a las personas participar en la construcción y actuación de identidades preferidas.

Un énfasis externalizador implica nombrar un problema para que la persona pueda evaluar los efectos del problema en su vida, pueda analizar cómo opera o funciona el problema en su vida y, al final, pueda elegir su relación con el problema.

«Mapa de posición»

En un enfoque narrativo, el terapeuta pretende adoptar una postura terapéutica de colaboración en lugar de imponer ideas a las personas dándoles consejos. Michael White desarrolló un mapa de conversación llamado «Statement of Position Map» diseñado para obtener la propia evaluación del cliente de los problemas y desarrollos en sus vidas. Se considera que tanto el terapeuta como el cliente tienen información valiosa y relevante para el proceso y el contenido de la conversación terapéutica. Al adoptar una postura de curiosidad y colaboración, el terapeuta pretende dar el mensaje implícito a las personas de que ya tienen conocimientos y habilidades para resolver los problemas a los que se enfrentan. Cuando las personas desarrollan soluciones a sus propios problemas sobre la base de sus propios valores, pueden llegar a comprometerse mucho más con la implementación de estas soluciones.

Práctica de re-membranzaEditar

La terapia narrativa identifica que las identidades son logros sociales y la práctica de re-membranza acerca a aquellos que apoyan la historia preferida de una persona sobre sí misma y desvincula a aquellos que no apoyan a la persona.

Ausente pero implícitoEditar

Dibujando el trabajo de Jacques Derrida, Michael White tenía curiosidad por los valores que estaban implícitos en el dolor, la sensación de fracaso y las acciones de las personas. A menudo, las personas sólo sienten el dolor o el fracaso en relación con sus valores, con cómo preferirían que fueran sus relaciones o su vida. Además, a menudo hay iniciativas estancadas que las personas toman en la vida que también se guían por valores implícitos.

Testigos externos mapEdit

En esta práctica narrativa particular o conversación, los testigos externos son oyentes invitados a una consulta. A menudo son amigos de la persona que consulta o antiguos clientes del terapeuta que tienen su propio conocimiento y experiencia del problema en cuestión. Durante la primera entrevista, entre el terapeuta y la persona consultante, el testigo externo escucha sin hacer comentarios.

A continuación, el terapeuta les entrevista con las instrucciones de no criticar o evaluar o hacer una proclamación sobre lo que acaban de escuchar, sino que simplemente digan qué frase o imagen les ha llamado la atención, seguida de cualquier resonancia entre sus luchas vitales y las que acaban de presenciar. Por último, se le pregunta a la persona externa de qué manera puede sentir un cambio en la forma en que se experimenta a sí misma desde que entró por primera vez en la sala.

A continuación, de manera similar, el terapeuta se dirige a la persona consultante, que ha estado escuchando todo el tiempo, y la entrevista sobre qué imágenes o frases se destacaron en la conversación que acaba de escuchar y qué resonancias han tocado una fibra sensible dentro de ella.

Al final, una conversación de testigos externos suele ser gratificante para los testigos. Pero para la persona que consulta los resultados son notables: aprenden que no son los únicos con este problema, y adquieren nuevas imágenes y conocimientos sobre él y sobre la dirección alternativa que han elegido en su vida. El objetivo principal de la terapia narrativa es involucrarse en los problemas de las personas proporcionando la mejor solución alternativa.

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