Una mirada a los selfies a través de la historia
Aunque el término ‘selfie’ solo se ha convertido en lenguaje estándar en los últimos años, el proceso ha sido común durante casi 200 años. A pesar de haber sido nombrada ‘Palabra del Año’ del Diccionario Oxford en 2015, es cualquier cosa menos un fenómeno moderno.
El primer uso del término fue en un foro público en septiembre de 2002. Un hombre australiano se hizo una foto de su labio desgarrado tras una noche de borrachera y buscaba consejo sobre los puntos de sutura que acababa de recibir.
Sin embargo, el primer selfie (denominado autorretrato en aquella época) se ha atribuido a Robert Cornelius en 1839. Cornelius, acreditado como uno de los grandes pioneros americanos de la fotografía, realizó un daguerrotipo de sí mismo.
© Robert Cornelius (1839)
Era un proceso bastante diferente al que estamos acostumbrados hoy en día. En primer lugar, el ritmo era mucho más lento. Tenía que destapar el objetivo, correr hacia la toma, mantener la pose entre 3 y 15 minutos y volver a colocar la tapa del objetivo. La mayoría de los famosos no posarían tanto tiempo con usted en una noche de fiesta. En 1914, la Gran Duquesa Anastasia Nikolaevna de Rusia se hizo una foto frente a un espejo para enviársela a una amiga, ¡convirtiéndose en una de las primeras adolescentes en hacerse un selfie!
© Duquesa Anastasia Nikolaevna (1914)
La primera vez que se tomó un autorretrato fotográfico utilizando el mismo proceso que hoy, con el fotógrafo sosteniendo la cámara a distancia, fue en diciembre de 1920. Los cinco hombres que tomaron la foto eran los principales fotógrafos de la Byron Company, un estudio fotográfico fundado en Manhattan en 1892 y que sigue funcionando en la actualidad. Otro hombre tomó una fotografía de los hombres documentando la trascendental ocasión. La imagen muestra a los cinco hombres de pie en el tejado del estudio Marceau sosteniendo una cámara analógica antediluviana que era tan pesada que requería que dos de los hombres la sostuvieran.
Y así es como se veía:
© The Byron Company via The Museum of the City of New York (1920)
Cuando las cámaras instantáneas, como la Polaroid, se hicieron más asequibles en la década de 1970, los fotógrafos empezaron a hacer más autorretratos porque el peso de las cámaras era muy ligero, lo que permitía sostenerlas casualmente a la distancia del brazo. También tenían la característica de producir fotografías de forma inmediata, proporcionando gratificación poco después de tomar la foto.
La proliferación de los smartphones es responsable de la accesibilidad de las cámaras al público en general. El lanzamiento del teléfono móvil Sony Ericsson Z1010 en 2003 introdujo la cámara frontal, que permitió la toma de selfies más fácil hasta la fecha. Después, en 2015, se inventó el palo selfie, que permite incluir más fondo y más personas en la composición.
¿Cuándo fue la primera vez que conociste el selfie?
¿Te hacías selfies mucho antes de que se popularizaran?
¿Se te ocurre cómo podrías utilizar el concepto de selfie en tu aula de enseñanza para la alfabetización?