Análisis del Samsung Gear S3: Samsung intenta meterlo todo en un reloj, pero no todo cuaja
Los smartwatches son experimentos. Para probar el futuro, hay que vivir con el compromiso en la muñeca. Pero para mucha gente, los relojes conectados es mejor que sean sencillos. La duración de la batería se impone a la cantidad de funciones, y la facilidad de uso a la sobrecarga de funciones. Al fin y al cabo, para eso están los teléfonos. El problema es que el Gear S3 todavía parece un experimento, cuando, en su segunda iteración (el S2 fue el primer gran rediseño), debería empezar a sentirse como un producto más maduro y pulido. Si quieres ver hacia dónde irán los relojes, Samsung está explorando las ideas ahora. ¿Conexión celular LTE autónoma sin teléfono? Sí. ¿Spotify en la muñeca? Comprobado. Pagos en la muñeca en cualquier lugar que sean incluso más versátiles que Apple Pay? Sí.
El Gear S3 es un smartwatch increíblemente rico en funciones con un diseño grande y atrevido. Pero a diferencia del último Apple Watch y de la próxima actualización de software 2.0 de Android, el Gear S3 de Samsung, basado en Tizen, no hace lo suficiente para mejorar la experiencia o soportar más aplicaciones. Y pocas de esas aplicaciones utilizan realmente el LTE autónomo del Gear S3. En términos de hardware, es un reloj mejor que el atrevido e inteligente Gear S2 del año pasado. Sin embargo, no da suficientes saltos en su software. El S2 del año pasado era innovador, pero necesitaba pulirse. Y realmente, necesitaba más aplicaciones.
Samsung Gear S3 Frontier
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Usé el Gear S3 durante más de un mes emparejado a un Samsung Galaxy S7 (lee mis impresiones iniciales aquí) y luego, recientemente, a través del iPhone 7, usando la nueva aplicación de emparejamiento de smartwatches iOS de Samsung. Sigue leyendo para saber todo lo que el Gear S3 hace bien, y dónde tropieza.
Básicamente, debes saber esto: Por 300 dólares (el coste básico de los modelos Classic o Frontier del reloj, ambos de aspecto elegante y con clase), te llevas un reloj sólido y complejo. Pero realmente no es mejor, en términos de software, que el del año pasado. Por su parte, el modelo Frontier equipado con LTE que analicé tiene todas las funciones del móvil y del teléfono, pero probablemente no merezca la pena su coste. Cuesta aproximadamente 350 dólares, 350 libras o 589 dólares australianos, pero las operadoras estadounidenses ofrecen un descuento de 100 dólares con un contrato de datos de dos años, algo que yo probablemente no haría. También requiere añadir un cargo extra de datos mensuales a tu plan de teléfono.
Android Wear 2.0 está a la vuelta de la esquina, y los nuevos relojes Android podrían estar por todas partes. El concepto de Samsung hace algunas ejecuciones exitosas, y algunas mejoras de hardware notables, pero no lo suficiente como para ser el reloj definitivo para todos. Y no se ha vuelto más fácil de usar.
Se ve bien.
Sarah Tew/CNET
Lo interesante
Samsung Pay: La incorporación de Samsung Pay al Gear S3 no solo permite tocar para pagar en los mismos lugares que suelen aceptar Apple Pay o Android Pay. Tiene MST, una tecnología magnética que también está en los teléfonos Galaxy de Samsung desde el Note 5 y el S6, y funciona en cualquier terminal de tarjeta de crédito. Es esencialmente una tarjeta de crédito virtual de uso en cualquier lugar, accesible con un doble clic de un botón. Funciona enviando un ping temporizado que funciona en máquinas expendedoras, terminales o en cualquier lugar cercano al lector de tarjetas de crédito. (El Gear S2 añadió Samsung Pay, pero sólo del tipo NFC.)
Spotify: Samsung por fin ha cumplido con ofrecer una aplicación de Spotify en el Gear S3 (y S2), y funciona. Hay advertencias: Puede transmitir a través de Wi-Fi o LTE (si compraste un Gear S3 que tiene LTE, como mi modelo de revisión), pero no puede descargar canciones. Y su interfaz es mala. Además, el streaming durante una hora y media casi agotó la batería de mi reloj. Pero… ¡funciona! (También requiere una suscripción de pago a Spotify.) Conecté los AirPods y escuché sobre la marcha, y fue bastante divertido. Pero prefiero descargar canciones y ahorrar datos.
Spotify funciona para hacer streaming de forma autónoma, pero consume batería.
El diseño: El Gear S3 viene en dos diseños, ambos mucho más «reloj normal» que el futurista pero de excelente aspecto Gear S2. Es un paso adelante y un paso atrás. El diseño grande (y digo grande) se siente como un enorme reloj deportivo en mi gruesa y peluda muñeca. Pero ese diseño no es para mucha gente, y pierde atractivo universal como resultado. Pero al menos está muy bien construido y tiene un aspecto de alta gama. El modelo equipado con LTE es como un tanque. Pero maldita sea, si te gustan los relojes grandes, este es un aspecto llamativo.
Es un teléfono independiente completo con LTE: Si compras el modelo LTE, puede recibir llamadas e incluso conectar aplicaciones sobre la marcha (a través de AT&T o T-Mobile en Estados Unidos). Si quieres un teléfono en tu muñeca, aquí lo tienes. Y es probablemente el mejor reloj con teléfono en la muñeca que existe. Con AT&T, por ejemplo, el reloj puede compartir un número con tu teléfono Android/Samsung. Si se le añaden unos auriculares Bluetooth, se pueden realizar llamadas discretas. ¿Lo necesitaría? No. Aunque algunos podrían hacerlo. Pero para usarlo como un teléfono LTE, tendrás que pagar una cuota mensual para añadirlo a tu plan de telefonía.
Las funciones de fitness S Health de Samsung son sorprendentemente buenas: S Health es la forma requerida para realizar un seguimiento de la aptitud en el Gear S, pero hace un seguimiento de la frecuencia cardíaca y de la actividad automática, puede registrar la ingesta de agua y café, y me recuerda cuando me he quedado quieto demasiado tiempo. Incluso me recomienda ejercicios de estiramiento cuando vuelvo a ponerme de pie. Me gusta que el S Health fomente las rachas de actividad -caminando un rato, me muestra el tiempo que he estado caminando- y a veces roza el coaching de fitness.