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El reencuadre es la herramienta más eficaz de la terapia, aquí se explica

Es común que los terapeutas hablen de «reencuadrar» algo. Pero, ¿qué significa eso?

El enfoque del terapeuta en el reencuadre cognitivo es algo con lo que probablemente te hayas encontrado si has estado en terapia antes. Si no lo has hecho, el concepto puede sonar un poco extraño al principio, pero te aseguro que tiene mucho sentido.

Explicación del reencuadre

La terapia, en su esencia, suele consistir en descubrir problemas y resolverlos. Por supuesto, nadie querría asistir a terapia si no pensara que le va a ayudar a afrontar mejor sus problemas, ya sea trabajando una relación problemática, haciendo el duelo por la pérdida de un ser querido o encontrando nuevas formas de manejar los síntomas de la depresión o la ansiedad.

Entender un problema es el quid del trabajo en los espacios de terapia. Cómo esperarías «arreglar» (o corregir) un problema si no estás completamente seguro de cuál es el problema? A veces los problemas pueden ser externos («¡Mi novio me ha engañado!») o más internos («¡Ya debería estar más avanzada en mi vida!»). A veces estos problemas nos sorprenden y son inevitables. Al fin y al cabo, muchos (si no todos) experimentamos preocupaciones sobre nuestras relaciones o sobre nuestro camino en la vida en algún momento. El problema podría ser, en parte, una cuestión de perspectiva.

Por qué un cambio de perspectiva es importante para el progreso personal

Como terapeuta, encuentro que algunas de las experiencias más valiosas en la terapia vienen cuando se experimenta un cambio de perspectiva. Ser capaz de ver una situación desde un punto de vista diferente puede ayudarte a sentirte mejor y a descubrir nuevas formas de manejar un problema o situación. En pocas palabras, a veces no podemos ver el bosque por los árboles. Y a menudo, ver ese panorama más amplio puede ayudarnos enormemente. Esto es lo que es el reencuadre.

El reencuadre, en el sentido terapéutico, consiste en ver una situación, pensamiento o sentimiento desde otro ángulo. Los terapeutas somos realmente buenos en esto porque nuestro objetivo es ser comprensivos y empáticos contigo y tus preocupaciones, pero también ayudarte a trabajar los problemas. Cuando tomamos sus retos, sean los que sean, y ofrecemos otra perspectiva, estamos «reencuadrando»

Esperamos ayudarle a ajustar su perspectiva o patrón de pensamiento basado en una reacción suya que está impulsada en gran medida por la emoción. Las emociones que sientes, o los pensamientos que piensas, a menudo están arraigados en viejos patrones que ya no te sirven. Al reencuadrar una situación, o adoptar una nueva perspectiva, puedes ayudar a ajustar esos patrones (y romperlos con el tiempo) dejándote sentir más sano y con más control de tu propia mente.

Un ejemplo de reencuadre en la práctica

Considera un ejemplo: Digamos que eres un veinteañero que ha terminado la universidad y que ahora entra en el mundo laboral. Te ha ido bien en la escuela, pero siempre te has encontrado compitiendo con tus compañeros. Esa competencia ha generado un poco de ansiedad por los logros. Te ha ido bien y has conseguido un trabajo decente con un sueldo justo que conlleva mucha responsabilidad. Sientes un gran sentido del deber de cumplir con los plazos rápidos, lo que hace aflorar viejas ansiedades sobre la comparación y el logro.

Cuando recibes tu primera revisión de rendimiento, obtienes el comentario de que podrías «gestionar tu tiempo de forma más eficiente», sin muchos otros comentarios. Esto te hace caer en picado. Ahora temes que tu jefe esté buscando una razón para deshacerse de ti. Intentas hacer todas las tareas muy rápido. Cometes más errores porque estás ansioso y te precipitas en los proyectos. Tienes miedo de perder tu trabajo. La ansiedad está provocando que rindas peor y no sabes qué hacer al respecto.

¿Y si replanteas ese feedback de tu jefe? Y si tu jefa se refiriera a que no le gusta que te quedes a menudo hasta tarde después de las horas de trabajo y quiere que te cuides más en el día a día? ¿Y si ve que tu trabajo es minucioso y eficiente, pero tiene miedo de que te quemes y acabes odiando tu trayectoria profesional?

Cualquiera de esas perspectivas puede ser cierta o no, pero lo que sí sabemos es que si puedes interrumpir la ansiedad y el miedo a que tu trabajo esté en peligro, es probable que rindas mucho más, tanto con el contenido de tu trabajo como con la gestión de tu tiempo. Reencuadrar puede ser la clave para liberarte de una espiral ansiosa de pensamientos que pueden o no ser ciertos. Incluso el simple hecho de detener el impulso de esos momentos podría salvar tu carrera y ser increíblemente positivo para tu salud mental.

El reencuadre es una única herramienta del amplio kit de terapia

Como puedes ver, el reencuadre es una herramienta que puedes utilizar para desafiar las suposiciones y los pensamientos automáticos que te surgen. Cuando podemos hacer un uso regular de las herramientas que ayudan a desafiar estas suposiciones, nos ponemos en una mentalidad mucho más saludable. Y, en última instancia, esto conduce a un gran cambio positivo en tu calidad de vida.

La próxima vez que empieces a sentirte ansioso, deprimido o abrumado, intenta replantear la situación y mirarla desde un ángulo ligeramente diferente. Si lo haces, es probable que termines en un lugar mucho mejor emocionalmente. Y si quieres tener ayuda para trabajar en esto (ya que puede ser difícil hacerlo solo) intenta trabajar con un terapeuta para obtener apoyo y orientación adicionales.

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